Historia muerta #1: Boda.

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ꟷ ¡¿No están casados?! – el grito de Ángel se hizo presente en todo el edificio, mientras el médico favorito de todos se cubría los oídos; acababan, John y él, de regresar esa misma noche de una misión y tuvieron poco descanso. – Pero incluso tienen una niña, ¿Cómo es posible que no estén casados?

ꟷ ¿Ves un anillo en mi mano? – el de raíces españolas extendió dicha parte de sí, mientras el policía observaba a detalle.

ꟷ Pues no. – concluyó.

ꟷ Exacto, un estúpido inglés que conoces no me lo ha propuesto. – le dio un largo sorbo a su café, queriendo omitir el tema.

Estaba enamorado de su rubio idiota, y era muy feliz con él; John era super gentil con su hija, e incluso con su perro, así que estaba seguro de que tendría una gran vida con John, y ya la tenía, pero realmente no eran nada serio: no hubo proposición, votos, algunas palabras, nada de nada, y eso le deprimía.

ꟷ ¿Y por qué no se lo pides tú? – se unió a la plática Miguel, quien regresaba con un bollo en la boca.

ꟷ ¿Si vieron como me puse cuando regresamos a mi departamento? Amo a John, en verdad que sí. – y ahí se formo un triste silencio. – pero no me siento preparado, no recordando a Jackson, siendo que su imagen me impediría proponérselo.

ꟷ Eso suena a una excusa barata. - se quejó Ángel, mientras golpeaba la mesa con algo de reproche. – Se ve claramente que se aman, y han pasado por tanto juntos que me parece una falta de respeto que no estén casados.

ꟷ Creo que estás exagerando. – interrumpió Miguel, algo incómodo por los gritos.

ꟷ Pues yo creo que tiene razón. – y Briana hizo acto de presencia. La dulce pelirroja dedicó una sonrisa a sus colegas, pero se mantuvo con Adriel. – Escucha, hombre, si realmente sientes eso por él, recordar no será un impedimento, el pasado nos hace un favor al mantenerse lejos, pero nosotros decidimos si alejarnos o no de él.

Y nuestro protagonista tuvo cosas que pensar. En una de las esquinas del comedor, el inglés de rubios cabellos había oído toda la plática, y realmente se sentía raro con todo eso.

<< Es obvio que quiero casarme con él >>. Pensó, mientras meditaba que hacer.

Había escuchado a su amante hablar de su antigua pareja, y él hablaba de su fallecida esposa, y podía decir que eso no interferiría entre ambos, pero sabía que de vez en cuando ambos se iban en esas ideas, en el "¿y si...?", cosas que ya no tendrán oportunidad de ser. Lastimosamente, algo de sus antiguos acompañantes todavía vivía en ellos, pero no era malo, Briana acaba de decir algo muy cierto.

Y John prefirió ver el futuro a lo lejos, siendo feliz por lo que fue al lado de su querida Valerie y será junto a su amado Adriel.

Ánimos renovados atravesaron su cuerpo, mientras salía de su escondite para llegar a la mesa de Adriel.

Hello, my love. – sonrió, y dio un beso en la mejilla al español.

ꟷ Hola, estúpido inglés, parece que amaneciste de buenas. – no objeto nada, y siguió con su café.

ꟷ Algo así, realmente tengo varias ideas en la cabeza que quiero lograr estos días. – dio unas palmadas en el hombro de su amado, y se dispuso a irse.

ꟷ Oye, ¿no desayudas, te acompaño? – rápidamente el médico se puso en pie. Pese a que ahora había más zombis, su preocupación por él podía justificarse con la inseguridad que ocasionaban los humanos mismos.

Historias con olor a muerte. | Madrid Zombi.Where stories live. Discover now