Capítulo narradoLa chica de pelo negro como el carbón se acercó a su amiga con duda.
-Perdón por lo anterior. Me enrabie un poco.
-¿Y porqué?-la chica rubia se sentó en el tobogán.- ¿Porque?
Al no obtener respuesta de la chica que tenía enfrente suyo, se dispuso a hablar.
-Cuando te envié el mensaje era para que tú fueras la segunda persona que supiera que soy bi, la primera fue mi hermano.
-¿Y tus padres? ¿Yo soy más importante que ellos?
-Están muertos, aunque igualmente no me habrían aceptado.
-¿Y eso es todo?
-No. Aún me queda que aceptes una cosa.
Alargó su mano, a lo que la chica peli negra se la agarró, para luego tirar de ella y hacerla caer encima suya.
Sus labios se unieron en una perfecta armonía, de pasar a comerse con la mirada ya habían pasado a comerse con la boca.
-¡Hey, que somos niños pequeños! Esto es para mayores de 18.
Las dos chicas, con gran pesar, apartaron sus labios. Un pequeño grupo de niños las estaban mirando fijamente.
-¿Después haréis lo mismo que cuando mis padres cierran con pestillo la llave de su cuarto?
-Bueno... si ella quiere...
La pelirubia le golpeó el hombro.
-¿¡Qué!? Tú fuiste la que me besó primero. Y ya sabes lo que viene después de eso.-la miró con una cara pervertida.- ¿Qué te parece si adoptamos a uno de estos?
-No se puede adoptar si no se es pareja estable, ¿le pidió salir?
-Casi que se me olvida.-la rubia subió a la parte de arriba del tobogán, para luego ayudar a hacer lo mismo a su futura novia.- Ya me gustaste desde inicios, pero ahora estoy enamoradísima. Y...
-Dejate de líos y bésame.
Se besaron, para luego separar por un momento los labios y hacer esa pregunta tan importante.
-¿Quieres ser mi novia?
-Claro que sí.
Las chicas se volvieron a besar, esta vez con más pasión. Los niños las empujaron, para que bajaran por el tobogán. Este momento habría sido memorable para una foto.