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Ahí me encontraba yo... tratando de asimilar cada palabra que me dijeron en la corte. Un psiquiátrico, que estaba loca, que lo asesiné, que me internarían.. era culpable de algún hecho que yo no me atrevería a hacer ni en mas de mil malditos años.

Loca..

Esa palabra resonaba en mi cabeza una y otra vez. El motivo lo desconocía.. solo quería acabar con este juicio de una vez, mi depresión me dejaba vagabundear por donde quisiera. Sin ser molestada por personas que no me entendían.

Ellos no sabían nada sobre mi. O eso pensaba yo.. llegaba el juez que me diría mi sentencia, mi castigo de por vida por ser tan ilusa. O eso pensaba yo. Se sienta y acomoda su traje largo negro, del otro lado la familia del que supuestamente había matado yo, sus miradas de furia, indignación y repulsión estaban puestas en mi, ya me había acostumbrado a ellas de alguna forma, ya eran parte de mi vida, el juez pidió que todos los presentes nos levantemos de nuestro lugares, todos obedecieron menos yo. No tenía el porque de hacerlo, yo no había hecho nada, pero trata de decirle eso a todas esas personas que estaban a mi derecha, todas ellas tenían un motivo en común... que yo estuviera tras unas rejas de metal frío, en una celda helada, hasta cumplir lo que el juez había dicho que tenía que obedecer. Un fuerte brazo hace que me levantase y saliera de mi catarata de pensamientos, un guardia de seguridad me había hecho pararme a la fuerza. A este punto todo era contra mi voluntad. Mis derechos de elección se habían esfumado.

El segundo juicio dio inicio llamando a los "testigos" que eran como unos tres o cuatro mas o menos. No tenía valor en mi misma de poder alzar la mirada y hablar con fuerza y seguridad sobre todo lo que opinaba sobre todo este caos. No podía decir quien realmente pudo haber sido quien halla matado a ese hombre, tenía una idea, pero la sospechosa era yo, y decir eso probablemente me pondría en un estatus peor del que estaba, el abogado encargado de mi pronunció mi nombre, de alguna manera tenía esperanzas de poder zafar de todo esto, alce mi mirada y era mi turno de pasar a declarar.

Otra vez?

Me preguntaba en mi mente. Ya lo había hecho anteriormente. Pero sabía que negarme no era una opción, me levanté de mi asiento y me dirigí al lugar que tenía que ocupar para mi declaración.

Ante mi se presentó una señora de unos 47 años de edad con cara de fastidio y desagrado. Y empezó el cuestionario que ya había hecho anteriormente.
El cual contestaba con un si, no, no lo hice, porque habría de hacerlo, jamas lo haría, no tenía nada con el, ni siquiera se quienes son, solo nos cruzamos una vez, etc. Lo mismo. Me dieron permiso de volver a mi lugar junto al abogado. El juez ordenó unos papeles y dijo:

Juez: bien señoras y señores el jurado tomará una decisión sobre el caso del asesinato del señor Park, pueden retirarse. Hasta nuevo aviso. Gracias.

Todos se levantaron y se dirigieron a la salida, por mi parte me quedé en ese gran salón con asientos de madera,no tenía a nadie afuera de ese lugar, nadie esperaba por mi, nadie trató de luchar por todo esto porque nadie me defendió. El recuerdo del rostro de aquel chico volvió a mi mente, y en ella se reproducía como una película de todo lo que habíamos pasado, esos momentos especiales para mi, las lágrimas salían de mi, como todas las veces que pensaba en el... si bien habían pasado años desde lo sucedido aún no podía superarlo, su forma de tratarme para mi era diferente a los demás, me sentía feliz, hasta que todo acabó ese día.. mi mudo se desmoronó y caí en esta cárcel de la depresión. Mis uñas rasgaban mi piel, y mi mente divagaba en ese mar de recuerdos, y de mis ojos las lágrimas... siento que alguien se sienta a mi lado por lo que supongo que el jurado ya había tomado una decisión sobre cual sería mi destino, limpie mis lágrimas y miré al frente, pero no había nadie..

Dos Almas... ✒Taehyung✒                         >luna<Donde viven las historias. Descúbrelo ahora