No, Tu No Vas A Ser El Padre ||| HOPEMIN ||| YAOI

Capítulo 17

HoSeok

JiMin no se quedó conmigo anoche, aunque ya me lo había dicho tenía la esperanza de que cambiara de opinión.
Me quedo parado en la puerta de su casa, no me dijo que no podía buscarlo por la mañana, así que no hay motivos para que se enoje.
Doy tres toques en la puerta y espero. No tarda mucho hasta que abren.

- ¿HoSeok?

Frunzo el ceño cuando veo al beta frente a mi, creí que JiMin abriría.

- JiMin me dijo que probablemente vendrías - se hace a un lado - pasa.

Avanzo con desconfianza, cuando entro intento identificar todos los aromas, solo percibo el de JiMin y el beta. Escucho como el beta cierra la puerta y se para frente a mi.

- JiMin me explicó todo - es lo primero que dice - si te soy honesto no entiendo tu comportamiento...

- ni yo el tuyo - digo serio - te ibas a hacer cargo de mi cachorro.

- no iba a dejar solo a JiMinie - se encoje de hombros - se sentía abrumado, un Omega se vuelve más vulnerable en un embarazo, si no se sentía seguro o estable pudo caer en depresión - frunce el ceño - y seria malo, tanto para él como para el cachorro, no quería quitarte tu lugar, solo quería evitar...

- entiendo - lo corto - fui un...

- idiota - sonríe - pero no soy nadie para juzgarte, aunque no estoy de acuerdo  con tus métodos apoyare en todo a lo que Mochi decida.

- ¿no te opondras como YoonGi? - pregunto sorprendido.

- JiMin te dio una oportunidad por una razón - empieza a caminar al sofá más cercano - y yo confío en su buen juicio, ve a su habitación, ya seguramente sabes cuál es - se ríe.

Un beta extraño.

- ¿está durmiendo? - miro el pasillo.

- creo que no - se escucha dudoso - o no se, cuando entre estaba en su nido.

- ¿un nido? - lo miro sorprendido.

- el embarazo hace que hagan cosas así para estar tranquilos - se encoje de hombros - ya deberías saberlo.

- lo sé, solo que no creí...

- ve - se ríe - le hará bien tu compañía, en esta esta etapa debe estar cerca de su Alfa.

- siempre me aleja - digo en voz baja.

- sigue intentando - sonríe - ahora ve, que yo debo seguir estudiando.

Empiezo a avanzar hasta su habitación, me detengo en la puerta y toco tres veces, pero no escucho ningún movimiento.
Vuelvo a tocar, pero todo sigue igual, frunzo el ceño y abro la puerta.
Veo a JiMin entre almohadas y mantas, (aka como la imagen), esta hecho bolita, lo que me sorprende es verlo aún con mi camisa puesta. Escucho su respiración acompasada, esta durmiendo, camino un poco hacia él.

- JiMin - habló en voz baja, no quiero despertarlo de golpe - JiMin.

Escucho como se queja y se encoje más en su lugar.

- JiMin, despierta - intento que mi voz sea suave.

- no - susurra con voz adormilada.

- ¿no irás a clases?

Lo veo negar con la cabeza y hacer un puchero aún con los ojos cerrados. Será mejor que lo deje descansar.

- entonces me iré - doy dos pasos hacia atrás - descansa, volveré después.

- HoSeok - dice con voz adormilada y ojos cerrados - ¿te quedas conmigo?

Abro los ojos al escuchar eso, ¿estará soñando o en verdad me dijo eso?

- por favor - se queja.

Por esos "por favor" él está esperando a mi cachorro, pero también porque yo cedo a estos.

- si, me quedo contigo - avanzo hacia él.

Dejo mi mochila en el suelo y de paso me quito los zapatos.
Me recuesto junto a él a una distancia prudente, pero él acorta la distancia, rodea mi cuerpo con su brazo y acomoda su cabeza en mi pecho.
Sonrio al ver lo que hizo y lo abrazo más a mi.
Quizás cuando despierte se enoje pero por ahora disfrutaré el momento.

JiMin

Abro lentamente los ojos, siento que descanse mucho mejor, me vuelvo a acomodar y siento algo, miro con atención y veo que ese "algo" es HoSeok.
Estoy apunto de gritar hasta que recuerdo lo que ocurrió horas antes.

Yo y mi jodida bocota.

- JiMin - escucho la voz grave de HoSeok

Me separo un poco de él, pero me rodea con sus brazos con más fuerza.

- HoSeok - me quejo - no soy como las putas que te tiras, a mi me tienes que tratar con delicadeza.

Lo empujo y me siento con los brazos cruzados.

- JiMin - frunce el ceño - ¿y ahora que hice? Solo te abrace, no tienes porqué ser tan malo.

Se levanta, empieza a ponerse los zapatos y toma su mochila.

- se que soy un imbécil - aparta la mirada - pero tampoco debes tratarme tan mal.

Me muerdo el labio inferior, tiene razón, no debo ser tan malo, él está intentando estar conmigo, a su extraña y retorcida manera pero lo hace.

Escucho como empieza a caminar hacia la puerta.

- espera - hablo rápido - por favor.

Se detiene y se gira a verme con el ceño fruncido.

- ven, siéntate - señalo el lugar junto a mi.

El con recelo se acerca y se sienta junto a mi.
Supongo que tiene motivos para ponerse así.
Tomo su mano.

- lo siento - digo en voz baja - aún estoy procesando todo y por eso actuó así.

- JiMin entiendo pero me gustaría un poco más comprensión de tu parte - se escucha decaído - intento hacer todo lo posible para que me aceptes.

- lo siento - acaricio su mano, no se que más hacer - ser un poco más flexible o al menos eso intentare.

Aunque sonríe aún puedo verlo decaído, me acerco un poco a él y beso su mejilla, el cual lo hace sonreír de verdad.
HoSeok puede que no sea tan malo, solo algo idiota.
Escucho su celular sonar, lo saca de su mochila y contesta.

- ¿SeulGi? No, no estoy en mi departamento - dice como si nada.

¿SeulGi? ¿Es en serio? ¿Se supone me va a cortejar y esta hablando con la zorra de SeulGi?

- si, hablamos después - cuelga.

Aparto mi mano de la de él y me levanto.

- ¿JiMin?

Camino hacia la puerta y salgo.
Tenía que estar hablando con esa zorra que tanto odio.

- oye - me detiene y me pega a su pecho - ¿por qué quitaste tu mano de la mía?

- qué te importa - intento safarme de su agarre.

- ¿estás enojado? - se acerca más a mi rostro.

- no, que va - río sarcástico.

- ¿no? - eleva una ceja.

- no - siseo.

- entonces, dime algo dulce - sonríe - si no estás enojado, di algo dulce.

- ¡LA PUTA DE SEULGI BAÑADA EN CHOCOLATE!

Lo empujo con todas mis fuerzas y me encierro en la habitación de JungKook.
Tenía que hablar con esa zorra, hay muchas más y se mete con esa.
¡JODETE JUNG HOSEOK!