-Ya voy madre!- gritó alto al escuchar a su madre llamarla- la verdad es que me quiero ir lejos. Quisiera poder vivir al otro lado del mundo tranquila y haciendo mi sueño realidad.- culminó con una voz frustrada a través del celular.
-Si lo sé amiga- le repondió Katherine- que sucede, ¿otra vez tu madre y tía?
-Si, la misma historia de cada semana.-
-Tranquila, yo sé que aveces puede ser perturbador y con ellas obligándote con algo que no quieres hacer, te entiendo, quién querría trabajar en una tienda de ropa tan pequeña que no se sabe si quedan mujeres en este planeta que le quedarían decente.-
-Definitivo, no se de dónde mi madre y mi tía sacaron semejante idea de vender esa ropa tan denigrante en un lugar tan turístico y decente.- terminó con mirada de disgusto.
-Bueno termina de alistarte que la expedición empieza pronto y siendo la estrella principal, tienes que llegar a tiempo.- concluyó Katherine escuchándose más emocionada de lo normal.
-Esta bien ya me falta poco, nos vemos allá.- aligerando el paso para no tardar más.
Colgó la llamada y mirándose en el espejo trató de terminar su maquillaje.
-Porqué hoy se me hace más difícil de lo normal maquillarme? Ya voy tarde- Exclamó enojándose consigo misma.
-Caroline! - su madre vuelve a gritar.
Abrió la puerta de su cuarto para responderle, era increíble como la voz de su madre llegaba hasta su cuarto siendo una casa tan grande. Caminando por el gran pasillo llegó al centro donde bajaban dos gigantes escaleras y pudo mirar hacia el primer piso, con medio maquillaje en su rostro respondió.
-Madre, ¿que sucede? Necesito terminar de arreglarme.- dijo un poco fastidiada luego de escuchar tantos gritos.
-Tu amado a llegado hace quince minutos.- dijo con una sonrisa hipócrita al tenerlo a su lado.
Vió a Stuart, su novio, al lado de su madre y como siempre con su celular texteando y hablando de negocios, obviamente no se había percatado de su presencia pues estaba en una llamada pero en realidad ya ni le interesaba, él era otro desde que ella volvió de ese viaje o bueno eso es lo que Katherine, su mejor amiga, le había dicho porque de verdad no se acordaba qué había pasado antes de ese suceso.
-Si madre ya me percaté, gracias por avisarme. Terminaré de alistarme y nos vamos.- dijo mirando a Stuart seria y dándole a madre una sonrisa falsa.
¿Porqué?, se preguntaba, ¿porqué este vacío en su corazón? Se supone que al mirar a su "amado" se sintiera llena o al menos alegre pero no. Era normal, como solo tener un acompañante para sus eventos. Y él siquiera daba indicios de amor hacia ella. Solamente vivía para sus negocios y vida social en la alta élite. Para él, la carrera de ella, su vida por la cual estaba más que enamorada, era solo una pérdida de tiempo.
Llegando a su habitación, decide terminar de una vez su maquillaje y caminando a su vestidor ve su gran vestido rojo con corte en forma de corazón. Luego de vestirse se observa en el gran espejo de su vestidor y nota su larga cola cayendo finamente por su cuerpo.
-Hoy será una gran noche para mi.- Dice sonriendo al espejo y mirándose orgullosa de sí misma.
Sale de la habitación para encontrarse con su novio y madre. Llegando, los escucha hablar a ambos sobre futuro compromiso entre ella y él.
- ¿Cuándo piensas proponérselo Stuart? Ya es hora que unan las familias y...- Dice su madre con cara de interés.
-De acuerdo señora, estaré programando algo para comprometernos.- Termina de decir cuando Caroline termina de bajar por las escaleras.- Amor estás hermosa- Suena su teléfono.- Permíteme, es una llamada importante- toma su teléfono. -¿Si? ese contrato ya está cerrado... - dice saliendo de la casa para su auto.
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Eres todo lo que deseo ©
RomanceChristian, un hombre cuya poderosa familia quiere que él herede toda su fortuna siendo el sucesor de la mayor y multimillonaria empresa Ashworth, pero él desea más que eso. Desea ser alguien por cuenta propia y eso conlleva buscar con quien ser, par...