Inferno- YOONMIN-OneShot

Unico

El viento sopla con calma. No se donde estoy pero no siento miedo, no siento incomodidad. A pesar de no conocer nada a mi alrededor, lo siento como mi hogar. Quizás aquí estuve con anterioridad y no lo recuerdo. No lo sé.

-El café se va a enfriar- me giré y mi alma se tomó un descanso. No puede esto ser real. Siento mis pies clavarse a la madera de roble por impulso y seguridad de que no saldré corriendo, siento mi interior llenarse de paz y a la vez alocarse pero aún así decido mantener la compostura.

-Voy- dije reprimiendo una sonrisa en un simple gesto con la comisura de mis labios que ni yo puedo definir que expresión hice, solo fue eso, un gesto.

-Te encuentras muy pensativo- dijiste sonriendo tan amable como siempre fuiste. Tan... tu.

-Creí que sería imposible volver a verte- confesé corriendo la silla en la mesa.

-Todo es posible. Al menos para mi- dijiste siempre tan optimista. Tan tu.

-Existen cosas que son imposibles pero te tengo aquí y comienzo a creer que esa filosofía es una falsedad- te dije sintiéndome tan feliz y emocionado.

-Muchas posturas se derrumban con la fuerza del amor- acercaste tu mano hasta acariciar la mia. Un simple roce, una caricia que llevó ondas eléctricas a todo mi cuerpo. Si con tan solo un roce ¡Imagina lo que un abrazo provocaría en mi!

Tenemos recuerdos juntos, recuerdos llenos de risas porque no recuerdo haberte visto llorar frente a mi. Nunca mereciste la osadía de un desdichado que solo buscaba herir a un ser tan perfecto como tu.

Mi vida a tu lado es semejante a brillantes y enormes sonrisas. Sonrisas que cuando me dedicabas no sabia quien de los dos era más feliz.

Me complace decir que siempre te entregué mi amor, que jamás fui mezquino en cuanto a amor se trataba. Porque era lo único que te merecías, un sincero y eterno amor.

-Visité el acantilado que tanto soñé. Existe, Jony. Es hermoso- sonreí junto a ti por inercia pura. Tu felicidad es mi felicidad.

-Puedes hacer lo que quieras. Eres libre, siempre lo fuiste- tu pupila se clavó en la mía, como una estaca de melancolía y dolor pero lejos de causarme aquellos sentimientos, la felicidad y el gozo se apoderaron de mi.

-Sigo insistiendo en que estas muy pensativo. Quita lo que tengas en la mente y abre los ojos para apreciar el paraíso frente a ti- mi nariz y ojos picaron, mi garganta se sintió obstruida.

-Solo estas tu- tu mano emprendió un vuelo y se posó como mariposa, delicada y de una cercanía agradable, sobre mi mejilla un vaivén lento le dedicaste con tu tan característica paciencia. -El paraíso frente a mi- se escapó el susurro de mis labios.

-Tienes que separar los sueños de la realidad. Siempre te lo he dicho, pero no aprendes.- un silbido acallado salió de mis labios con la única intención de callar tus palabras.

-Prefiero vivir así aunque este ma...- hiciste lo mismo que yo para callarme y me gustó. Todo de ti me enamora más. Incluso cuando no estas.

Mi corazón es testigo de todo el amor que mi alma profesaba por ti y aunque la estación del adiós haya quedado a varios kilómetros de aquí, mi corazón aún palpita por ti, mi alma aún es esencia por ti, yo aún soy por ti.

La luna iluminaba la noche. Bajo el claro de luna me pediste bailar aquella canción que volviste a reproducir, no recuerdo cuantas veces fueron, solo se que sentí eterno aquel momento y me hubiese gustado que fuese así, que fueras así, eternamente para mí.

"Demonios internos"
Metáforas usadas por todos los desilusionados de la vida.

"Angeles externos"
Nomenclatura asignada a los seres  poesía como lo eras en tu fino existir.