Little Fyodor.

Mafioso FyoFyo!

Pisadas sonaron en el pasillo haciendo un eco, los tacones rojos que portaba la fémina de hebras azabache quién portaba una mariposa como adorno en su testa; sostuvo fuertemente del coche que había comprado mucho antes de llegar al lugar. Fue difícil entrar. Ser miembro de la organización enemiga de otra, era un peligro. Algunos guardias intentaron dispararle pero como traía consigo un niño pequeño y la fémina cargaba su larga y afilada hacha, los hombres temblaron de miedo luego de escuchar que la doctora iba a investigar con sus cuerpos; el como hacerles una resignación de sexo. Luego de dichas palabras, con desinterés cruzó hacia el interior de la Port mafia. Dejando atrás a los hombres quienes seguían perplejos y escondiendo su parte baja.

El niño rió ante lo visto por la mujer, incluso aplaudió, provocando que ésta se sintiera orgullosa de ser la 'madre' de repuesto del pequeño Fyodor. Ella subió en el elevador, buscando cierta oficina que le había escrito el castaño de vendajes en un papel, presionó el botón y el ascensor la llevó hasta arriba. Supuestamente allí se encontraría de nuevo con el usuario que dominaba la gravedad, el pelirrojo quién era una persona maestra en las artes marciales mixtas y que logró derrumbarla incluso. Claro. Ella no pediría revancha, a menos que él se lo pudiera...

Cuando llegó al piso deseado, Yosano empujó el coche de bebé para salir del elevador, le sorprendió que no hubiera secretaria o algo así. Sólo habían un montón de guardias armados, apuntandola. Ah... Tenía que repetir lo mismo que allí abajo. Los hombres eran una basura. ¿Qué acaso no tenían modales para presentarse hacia una mujer?

Los hombres vestidos de negro se acercaron a ella. Akiko por supuesto llevaba consigo su arma para rebanar, fruncida del ceño se expresaba a la vez miraba como los hombres se dedicaban a investigar si el bebé era una especie de suplente o una bomba, aquello no le gustó al niño de casi 3 años. Mucho menos cuando el guardia de negro tocó su rostro y lo acarició, intentó hacerle cosquillas en el cuello. Sin embargo, Fyodor lo mordió con agresividad, haciendo que el miembro de la Port Mafia quitara su dígito de allí y chillara bajito de dolor. Su compañero aún tenía la vista puesta en la fémina, ella aburrida lo observó y bufó, no iba a bajar su arma y mucho menos entregarla. Además, ¡no estaba allí porque ella quisiera! ¡Fue un recado! Ah pero si fuera Dazai con alfombra y todo le permitirían pasar. Hipócritas.

━ Esto se está volviendo muy aburrido para mi... ¿Me van a dejar pasar o quieren qué les cambie el pene por una vagina? Quizás así entenderán el dolor el cual todas nosotras pasamos cada un mes. ━ comentó en tono de desánimo. Dio un suspiro. Sus palabras fueron los explícitas pero ya estaba harta de pasar por loa misma seguridad.

━ No puede pasar, usted es un miembro de la agencia armada de detectives. Sino quiere morir, es mejor que se retire. Está es un área restringida.

━ ¿Área restringida?━ Ceja arqueó burlona por el hombre. Se carcajeó. ━ No me interesa que tipo de cosas importan ilegales aquí y mucho menos me interesa buscar una salida.

━ Sino hace lo que digo, le vamos a disparar.

Y aquello fue la gota que derramó el vaso de paciencia para la azabache, con uno de sus tacones; le pisó un pie al guardia que había sido mordido por el niño. El hombre de negro contrario disparó pero hábilmente la muchacha de hebras oscuras esquivó la bala, su cuchillo apuntó hacia la cabeza del miembro de la mafia portuaria. Por poco y perdía la cabeza pero como él también era profesional, el filo tan solo le había rozado la testa.

━ Mujeres como tú no saben pelear.

━ ¿Me lo dice un calvo?

Cuando escuchó calvo, el masculino se quedó perplejo puesto que tenía cabello pero al tocarse con una mano; pudo notar como en el medio de su cabeza, no había rastros de pelo. El ajeno se avergonzó. Su compañero al ver su calva, se tocó su testa con miedo quedar de esa manera si se iba en contra la doctora. Solo levantó sus manos como si estuviera arrestado cuando la mujer lo señaló con el arma afilada.