Déjame ir

Cap. 1: Desconocidos (Parte 1)

No hay manera de saber las reglas o el objetivo a la cual vivir, hay mas de 7550 millones de personas en el mundo haciendo lo que se les plazca y hay castigos por perder o ganar, no puedes pasar momentos, no puedes evitar el dolor, no hay manera de saber hasta donde llegará la facilidad, ni tampoco cuando nuestros seres queridos tendrán que partir algún día, no hay parámetros ni guías para saber si estás en lo correcto o si te estás desviando del camino, estás en la boca de todos para juzgarte y para olvidarte cuando renaces. "El mundo en el que vivo cada vez se vuelve mas vació".

Voz desconocida: "Vuestros mundos debe de ser un duro lugar para vivir, ¿Verdad? ¿Qué piensas de tu mundo? ¿Es divertido? ¿Es fácil vivir o sobrevivir en él?" 

???: ¿Que pienso yo? 

Voz desconocida: Si... Veo que aun no lo tienes claro, si te darán la opción de volver a nacer... ¿Lo harías?

???: Tendría que pensarlo bien, porque... nadie me asegura a que vuelva nacer en esta misma vida, la que me ha costado mucho.

Voz desconocida: Así que sobrevives y no te das el placer de vivir. ¿Que te impide hacerlo?

???: No me siento feliz en este mundo, a pesar de que de todo de mí a los demás, me importa poco saber de mí. 

Voz desconocida: Creo que ya te haz dado cuenta, porque lo que dices es cierto, eres la luz de las personas que llegan a tu vida, pero, cada vez que transmites esa hermosa luz que hay en ti, poco a poco tu ser y tu alma han perdido ese brillo, ese color, esa aura que te caracteriza, así estés muriendo por dentro, tú, sigues de pie, tu y solamente tú sabes como levantarte de las cenizas y seguir siendo el niño interior que aún la sociedad no ha podido desaparecer, ¡Eres asombroso!

No hay manera de seguir viviendo en una mentira que poco a poco van abriendo cicatrices, aunque suene forzado, cada quien tiene sus luchas internas para no estar estorbando, incomodando, tratándonos de victimas, burlarse de nosotros y peores cosas más de nuestras dolencias, ¿Para qué compartir el dolor cuando este es ajeno a ellos? , se que "No todos son iguales", pero la costumbre a la que te someten te hacen esquivo, te hacen frío, poco a poco nuestra humanidad, desaparece y solo nos queda llorar y gritar por dentro. Maldecir tu vida, día a día, con el recurso inútil y subliminal de pedir ayuda cuando estás rodeado, cosa que a la vez te sientes solo con esa "compañía". 

Voz desconocida: No te des tan duro contigo mismo, no fue culpa tuya con las vivencias que haz tenido que pasar... 

???: Por favor, no insistas más... pero no te vayas, aun no quiero despertar de este sueño tipo purgatorio a la cual apareces. 

Voz desconocida: Tómalo con calma... 

???: Le di a esta vida todo lo que tenía, estaba vivo, desde el primer momento en que te conocí, nunca mas estuve solo pero fue tanta la vida que me diste que hoy en día no estas viva, a pesar de que quiera morir una y otra vez, dentro muy dentro de mi... ahí estás... 

Voz desconocida: Aún así, estas aquí, eso demuestra mucho de ti. No olvides, mi universo, mi mundo, lo que vivimos juntos está aquí, en tu corazón, todo gracias a ti. 

???: Gracias por haber existido para mí... 

Tan dura sea la realidad y tan pocas las posibilidades de seguir, aún existen mundos en nuestro interior, esa luz en forma de personas son algunas de las razones que impiden que no cometas locuras o acciones estúpidas, se vuelven una maldita barrera y ahí empiezan aparecer en tu mente, como memorias ante el posible episodio final de nuestras vidas... Pero no es así aquí sigo, aquí seguimos o hasta donde podamos durar...