I

10 2 0
                                    


-Adiós- le susurró con la voz quebrada- Perdóname por dejarte, ángel de mi corazón. Te esperaré cuando tengamos otras amistades, otros padres, otros nombres, otros hogares, otros cuerpos; pero te prometo que nuestras almas seguirán siendo las mismas, unidas por nuestro amor inquebrantable - el llanto escapó de su garganta y las lágrimas recorrían sus mejillas, caian sobre el pecho de aquella joven hermosa que acababa de morir en sus brazos-. Cuando vengas a mi otra vez, sabré quién eres, incluso si la sonrisa que se dibuja en tu rostro es retratada con otro pincel y tus ojos enfoquen el tinte de un extraño.

Hasta Que La Muerte Nos SepareDonde viven las historias. Descúbrelo ahora