Recuerdame

~Simón y Ámbar~

¿Paso algo de que me perdí?.

Ámbar esta rara conmigo, pensé que ya habíamos avanzado, no me a dejado de hablar eso es un alivio para mi, pero no deja de inquietar me que me rehuya casi todo el tiempo, digo casi por que cuando estamos en grupo ella esta conmigo y aparenta estar cómoda, mientras tanto cuando estamos solos y trato de acercarme ella se va y me deja a media palabra o a medio paso.

—¿Miras a Ámbar Chico Fresa? —la vos de Luna surgió desde atrás, y yo solo quería partirme en dos el vaso con el batido que trataba de beber antes de  escucharla—

—No es de tu incumbencia Valente.

—¡Valla!, ¿donde quedo la buena onda Matteo?.

—Luna en serio, no estoy de humor.

Y como si le hubiera dicho quedate, ella movió la silla a mi lado y se sentó. Un suspiro salio de mi. Estaba cansado.

Luna comenzó a parlotear, a tratar de llamar mi atención, pero nada lo conseguía, yo pensado en la Rubia.

—Por cierto, vamos a ir todos a patinar al parque..., —hizo una pausa— Simón invito a Ámbar.

(...)

Casi sentía como mis patines me hacia volar, apenas Luna nombro en la misma oración a Ámbar con el Guitarrista, no dude ni un segundo en venir, ¿que tiene que estarse metiendo él con mi chica?, simplemente no lo entiendo.

El ruido de mi derrape hizo que todos más miraran, pero yo sin perder tiempo busque a la Rubia mechas rosas, no tarde en encontrarla, pero no sola, si no con el maldito Guitarrista, riéndose ella de algo que él le contada.

—¡Por fin te alcance! —volteo un poco para ver a una Luna jadeando de cansancio, me había olvidado de ella desde la segunda cuadra— Si que eres rápido.

Simón miro sobre el hombro de Ámbar y al verme hizo una mueca, Ámbar al darse cuenta volteo y me vio, su mirada curiosa me atacó y me hizo sentir totalmente desprotegido.

—Bien ya que estamos todos —comenzo Delfi— ¿por que no hacemos unas carreritas en pareja?, los que ganen, se llevan un batido del Roller.

Estaba apunto de decir que eso era una estupidez cuando dos personas sincronizadas hablaron antes que yo.

—¡Claro! —una risa de cómplice salio de Simón y Ámbar, esto me hizo apretar la mandíbula —

—¡Ven!, esa es la actitud —hablo Delfina— Yo voy con Pedro —chillo agarrándose del brazo de su novio—

Y así cada uno se fue juntando, Nico con Jazmín, Yim y Yam, Nina con su novio al que siempre se me olvidaba su nombre, y por ultimo Simón y Ámbar.

—Creo que nos toco junto chico fresa —dijo colocándose a mi lado con una pequeña sonrisa— ¿como los viejos tiempos?.

Le di una pequeña sonrisa cansada.

—Claro.

(...)

Terminamos empate, algo que me sorprendió un poco, Simón y Ámbar versus Luna y yo.

—No se que decir, creo que a los dos les debemos unos batidos. —hablo Pedro un poco cansado—

—¡No! —chillo Luna, sorprendiéndonos a todos— Hay que hacer un desempate.

Todos se miraron sin saber que hacer, ni que decir, Luna no era de esas, pero siempre salio con algo con lo cual sorprender.

—No tengo ni idea que podrían hacer.

—¿Y si hacemos una improvisada competencia, en el Roller?. —propuso Ámbar— propongo algo divertido, en..., ¿unas dos horas?.

—Alli estaremos —sentencio Luna—

Y sin más cada quien tomo un rumbo diferente, yo siguiendo a Luna algo descolocado, ¿desde cuando ella era así?.

—¿Que fue eso Luna?.

—¿Que cosa?.

—¡Luna eso!, ¿por que actuastes de esa manera?.

La mirada de Luna se volvió rara, y sin mucha seguridad puedo decir que vi que su mirada cambio a un oscuro extraño, hasta sentí como la piel se me ponía de gallina.

—Mira, tu actúas de maneras extrañas y nadie dice nada, así que tu haz lo mismo conmigo, no me digas nada.

Asentí un poco confundido.