ONE-SHOTS [Multiverse Stony]

MCU | Tener antes de Perder

•Disclaimer: Contenido escrito solo por diversión y entretenimiento, todos los personajes y lo que ellos mismo incluyen, en cada una de las versiones aquí escritas, pertenecen a Marvel, a partir de sus películas, cómics, series animadas, videojuegos, etc.

•Géneros: Drama.

•Rating: K.

•Advertencias: Angst. Lemon.

•Sinopsis:  Tony sabía lo que ocurriría pronto, así que solo le quedaba aprovechar este último momento con Steve, antes de que este se diese cuenta qué tan distintos eran como para continuar.

[ * * * ]

Año: 2015; La noche antes de la fiesta en la Torre Vengadores.

Tony deseaba muchas cosas.

Y el dinero que poseía, contrario al conocimiento popular que ofrecían aquellos tontos periódicos sensacionalistas, no era suficiente para obtener varias de esa, incluso más tonta, interminable lista caótica.

Aquello lo sabe muy bien porque... Porque Steve es una de ellas. El preciado himno de América, el héroe de ensueño, él, es solo uno más que se encuentra demasiado lejos de su alcance.

Lejos.

Quiere reír por la incongruencia, por la ironía que carcome sus demás pensamientos, pero se detiene, porque su voz amenaza con escapar agria y débil y él decide que no es buena idea intentarlo. En vez de ello, dirige su mirada a los bordes de la cama, tan cercana a sus dedos que lo empuja a preguntarse, ¿por qué Steve tendría que estar tan lejos de él? Es... Una defición tan confusa. Profunda y más tediosa de lo que podría ser saludable para su agobiada mente. Pero ahí sigue, siendo un punto muerto y constante en un rincón de su cabeza. Steve podría estar junto a él, a pocos metros de su propio cuerpo y ser, aún así, la persona más fuera de su alcance que pudiera existir.

Como ahora.

Como sucedía malditamente ahora.

Observa el cuerpo de Steve echado a un lado suyo, con aquella mirada esperanzada y hueca que es muy parte de él ahora. Rubio, de rasgos agradables y hermosos labios rojizos, el Capitán parece solo un hombre más sobre una cama. No superpoderes, no grupos ni más batallas, solo un hombre.

Tony desea, por un instante, que todo fuese así de sencillo.

Pero no lo es y jamás podrá volver a serlo. No cuando cierra los ojos y visualiza un oscuro ambiente que revela monstruos gigantes surcando los cielos y cinco héroes echados sobre desmontes y ruinas. Muertos.

«Pudiste haber hecho más.»

— Dios, lo sé. Yo... Lo intento.

Aprieta sus ojos e intenta olvidar todo, porque esto ya no se trataba de aquella visión. Mañana, en tan pocas horas, todo sería diferente, así que en este pequeño momento de lucidez, Tony trataría de que lo que siempre estuvo lejos, fuera siquiera un poco suyo.

Se erige sobre las delgadas sábanas y deshecha cualquier pensamiento que estuviese relacionado con pensamientos racionales o consecuentes. Ahora había más deslizándose por su mente, esa enfermiza necesidad de tenerlo todo, de acaparar cada sensación y caricia que sabía pronto ya no podría tener.

Steve siempre fue demasiado bueno para él. Polos opuestos y esas demás tonterías. No coincidir fue un punto divertido por un tiempo, luego... Fue el inicio de una constante batalla que intentaban ignorar como si no fuese un problema. Nadie puede evitar ver lo obvio, acallar las discordancias que siempre parecen costar más de lo que deberían. Lo que parecía correcto por hacer, lo que ya hizo, sabía, le costaría lo que habían construido. De todas formas, piensa, en algún momento hubiese tenido que terminar.