Lucas, un chico de 21 años, el cual tenía aspecto de un niño de 17 años, planeaba quedar
con Patricia, su novia, a la que hacía mucho no veía, y al resto de sus amigos. Decidió
llamar a su amigo Iñaki para ponerse de acuerdo con él.
Lucas se caracterizaba sobre todo por ser muy precavido, le gustaba asegurarse de que todo fuese según habían pactado, por eso llamó a Iñaki, para confirmar que todo estuviese
conforme.
- Vamos descuelga.- Decía Lucas cada vez más nervioso.
El teléfono sonó durante largo rato, al ver que este no contestaba decidió colgar y acostarse,
al cabo de unos minutos durante los cuales Lucas se preparaba para ir a la cama, empezó a
sonar el teléfono de su casa, el cual, Lucas cogió con un poco de rabia por no poder dormir:
- Tío,¿ qué pasa?
- Tío, escucha ¿a qué hora quedamos mañana?- Preguntó Iñaki a modo de saludo.
- Quedamos a las 8 de la mañana, junto a la cueva, hasta mañana.
Al colgar el teléfono, se fue a la cama a descansar, ya que el cuerpo lo necesitaba y se lo
pedía a gritos. Tras acostarse, cayó en un profundo sueño a los pocos minutos, mientras
dormía solo podía pensar en estar junto a la mujer que amaba, cuando amaneció, él ya
estaba despierto, estaba impaciente por estar con Patricia, así que decidió salir un poco
antes para esperar a su novia y los demás, cuando más se acercaba la hora, más impaciente
estaba con ver a sus amigos, los cuales llegaron a la hora en punto, eran Alejandro, Aracely,
Ismael, Iñaki, Patricia, y el propio Lucas, tras reunirse empezaron a hablar
- Hola chicos.-Saludó Lucas mientras les sonreía ampliamente y miraba a su pareja, tras
sonreírle, ésta salió corriendo a abrazarlo, tenía la felicidad reflejada en sus ojos, igual que
él.
- ¡Hola cielo!-Dijo Patricia mientras se lanzaba a sus brazos sonriendo, al hacerlo, acabaron
fundidos en un abrazo y en un cálido beso.
- ¿Vamos chicos?- Saludaron Aracely e Ismael mientras Lucas y Patricia acababan de
separar sus labios para mirar a sus amigos con una leve sonrisa, sin mostrar envidia.
Tras ver las provisiones que llevaban todos en sus mochilas de instituto, calcularon el
dinero, y la comida que iban a necesitar, pero antes de que comenzasen a caminar, el suelo
empezó a temblar tras esto los jóvenes se asustaron e intentaron mantener el equilibrio.
- ¿Qué está pasando?- Preguntó Lucas con los ojos casi desorbitados.
Patricia se abrazó a su ser amado, muy asustada, tenía miedo de que la cueva se derrumbase
y quedaran atrapados.
-Tenemos que salir de aquí...¡vamos!- Dijo Aracely tras empezar a correr sin saber muy
bien qué rumbo debían tomar.
Ismael se puso en rumbo justo detrás de ella, procurando no caer por el temblor que estaba
atizando sus cuerpos amenazando con producir un fuerte daño a sus cuerpos.
- ¡Será mejor ponernos a cubierto!- Gritó Iñaki alarmado y a la vez asustado.
Sus esfuerzos por mantener el equilibrio no parecían dar los resultados esperados, el suelo
se resquebrajó a sus pies y todos cayeron por la gran abertura que se produjo, quedando sin
sentido, algunos bastante magullados, pero lo más que tenían eran cortes , ninguna rotura
de hueso, por fortuna para ellos, no obstante ellos no podían saberlo debido a que estaban
sin sentido, mientras la tenue luz de un agujero bañaba sus cuerpos, mientras la sangre
brotaba de sus heridas, no se escuchaba el viento, debido a que estaban algunos metros de
la salida, pero tendrían que escalar cuando recobraran la conciencia, al caer, su comida
quedo chafada, los zumos se estropearon, en el exterior se escuchaba el cantar de un gallo
debido a que la mañana estaba llegando pero debido a donde se encontraban y en su estado estos no podrían escucharlo.
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El nuevo mundo.
RandomUn grupo de chicos y chicas son enviados a un lugar que ellos desconocen cuando organizan una excursión a la montaña a pasar un día de diversión, llamado el mundo Ragnarok, al llegar se dan cuenta de que ellos son elegidos por una antigua profecía p...