Reunión

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La musica se escuchaba en todo el departamente, estaba cocinando mientras bailaba. Llevaba puestos uno shorts cortos y una camiseta que no era de su propiedad, le quedaba muy grande pero le encantaba el aroma que desprendía, a su alfa. Con solo pensarlo se le estremecía todo el cuerpo. Pensar en Asami como su alfa era lo que lo ponía feliz y reconfortaba su día a día.

Sentía unas mano recorrer su cintura y pasar a dar pellizcos a sus sensibles pezones. Ya sabia quien estaba detrás, era muy facíl reconocer ese aroma que lo excitaba en su celo.

-¿Que estás cocinando? Huele muy bien- el yakuza habia entrado a el departamento con mucho sigilo, quería sorprender a su sexy rubio que le hacia pasar buenas noches de sexo.

- Solo estoy haciendo la cena, es algo muy común. Se volteo repentinamente sorprendiendo al alfa con un tierno beso, algo muy cotidiano de Akihito. A Asami le precía tierno que su amante o juguete comenzará la iniciativa.

Sus labios se separaron al necesitar ambos el tan preciado oxigeno. Aquella cocina no le sorprendía ver a ambos besarse tiernamente y luego verlos desnudos soltando gemidos y jadeos.

- ¿La musica te molesta?- dijo Akihito mientras se apegaba más al cuerpo de Ryuichii.

- No para nada- En si Asami le molestaba todo de Akihito, su comida, sus gustos musicales, su ideas , le molestaba todo de él excepto su hermoso cuerpo. " Hay que sacrificarse para obtener lo que uno desea"  ese era el lema de Asami en cuanto se trataba de Akihito.- Pero lo que molesta es que no me sigas besando- le repugnaba oír esas palabras empalagosas que salían de su boca, era asqueroso pero sino trataba hací al rubio perderia hasta uan semana de buen sexo y no quería ir con una prostituta.

Akihito se sonrojo al escuchar esas palabras, le enamoraba que Asami le hablé así , que le diga de vez en cuando que lo necesitaba, que necesitaba todo de él para no morir.

Sus besos tiernos se convirtieron en besos apasionados y necesitados, sus pendras fueron despojadas una a una. Akihito gemía debajo de Asami que aceleraba sus embestidas. Sus espalda estaba hecha un desastre por los fuertes arañazos de Akihito. El pelinegro estaba a punto de venirse.

- As-ami a-dent-ro no!- el rubio intentaba separarse del agarre del yakuza sin embargo le fue imposible. Se corrió dentro.

Despues de eso Asami tuvo que cargar a Akihito a la habitación que compartían. Al mayor le parecia molesto hacer eso. Luego durmieron, uno muy placidamente y otro irritado por el contacto que tenia con el menor.

La noche anterior habia sido muy pesada y agotadora, Asami habia marcado su cuerpo con chupetones y mordidas, el alfa podía ser muy posesivo y a él le encantaba, hallaba tierno el hecho que Asami lo marqué, sentía que era un paso para ser marcado realmente.

Asami le rodeaba con su brazo, lo abrazaba cada noche sin darse cuenta, lo apretaba contra su pecho para sentirse seguro que su propiedad este junto a él. El castaño había aprendido a liberarse de su agarre para no levantarlo.

Camino de puntitas para no hacer mucho ruido, tomó sus short y se los colocó. Cerró sigilosamente la puerta, daba gracias a dio que Asami ordenará qur la habitacióm fuera antisonido, nadie podía escuchar lo que pasaba adentro y nadie podía escuchar lo que sucedía fuera de ella.

Tomó su delantal rosa con flores puso manos a la obra. El desayuno de hoy era huevos escalfados con tostadas y rodajas de aguacate junto con un jugo surtido de frutas con café de granos.
Sus clases de cocina había comenzado a dar frutos, preparó la primer comida del día en tan solo 20 minutos. Quedó fascinafo con la rapidez y presentación del platillo.

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⏰ Última actualización: Dec 15, 2019 ⏰

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