Capricho Toxico

Era el mes de junio, yo era nuevo en un colegio que no conocía, con gente que tampoco conocía. Entre esas personas estaba ella, Green, una chica tan pero tan hermosa que me volvía loco.
Habían pasado dos meses, yo había empezado a salir con Lucy. Yo era un bicho raro, pelo de colores, uñas pintadas y con ojeras que remarcaba con delineador, lo cual llamaba mucho la atención. Poco a poco me fui enamorando de Lucy, pero yo hablaba con Green, la chica que me traía loco pero con la cual, no pasaba nada.
Un día, Lucy junto a su curso y otros más se fueron de excursión. Ese día, Green había ido al colegio a llevar unos papeles. Mi curso era el único con clases y tocó el timbre del recreo, todos mis compañeros salieron exepto yo. Entre ella y yo había química, pero jamás habría pensado que lo que pasó ese día, pudiera haber sucedido.
Ella entró en mi salón y se sentó sobre una mesa, yo seguí mis instintos y me acerqué a ella, me acerqué tanto que en un momento estábamos frente a frente y ella acercó su boca a la mía, comenzamos a besarnos y ella se pegó tanto a mi que comencé a tocarla. Luego ella se fue y sólo dejó pensamientos en mi. Yo no podía seguir en mi relación con Lucy después de lo que había pasado con Green y por eso, decidí terminar con ella.
Un día, volví a encontrarme con Green en los baños, yo la metí dentro de unas cabinas y comenzamos a besarnos. Yo meti mi mano debajo de su remera tocándole los pechos y ella con jadeos me dijo "Si que te gusta tocar", yo la miraba y las ganas incrementaban más y más. Luego, ella como siempre se fue y dejo en mi muchas preguntas. Yo como un idiota, estaba rompiendo las reglas del juego la cual era, no enamorarnos pero yo me estaba enamorando de ella.
Green me llevo a su casa, conocí a su familia y ese, ese fue mi peor error. Porque ellos se convirtieron en mi segunda familia y los amaba más que a la mía propia.
Ella se convirtió en mi segundo más grande amor, la persona en la que más confiaba, le conté mis secretos y temores, mis sueños y metas, ella se convirtió en la protagonista de mi vida, mi razón de vivir y sonreír, me adentre en su familia así como en ella, los visitaba a diario y cada vez me encariñaba más y más. Pero como todas las historias, esta no tenía un final feliz, "La calma antes de la tormenta" dice el dicho. Y en ese momento había terminado la calma, y la tormenta se acercaba. Entre Green y yo todo era color de rosas, pero había algo que no nos dejaba ser felices y ese algo era el ex de Green, que aún seguía en su cabeza y ella no lo podía superar. Fumando, llorando y lleno de dolor me encierro en mi cuarto. Una o dos, no de cuantas pero fueron muchas las notas que escribí porque ya no quería vivir más y con mucha rabia, tome una hoja de Gillette y comencé a cortar cada parte de mi cuerpo, por toda la sangre que había perdido, comencé a quedarme dormido así como siempre había querido. Pero, no sucedió ya que seguí con vida.
Había llegado diciembre, "necesito cambiar de capítulo", yo ya no tenía muchas ganas de hacerlo pero siempre nos entregamos a nuestros caprichos aunque muchas veces sean tóxicos, así que decidí intentarlo devuelta.