Cuando un joven termina sus estudios en el seminario éste pasa a otra etapa, la cual es el diaconado.
Esta etapa es previa al sacerdocio, y en ella obtiene el poder de llevar acabo algunas actividades específicas.
Por ejemplo, una de las tareas del sacerdote es confesar a los creyentes y darles el perdón, el cual está siendo enviado por Dios a través de él. Y en el caso de un diacono, esta actividad es aun imposible.
Esta etapa suele durar alrededor de un año o lo que el obispo diga.
Cuando el tiempo haya pasado y el obispo de aviso de su ordenación, llega el momento esperado.
Durante la celebración eucarística el aún diacono debe hacer sus votos recostado frente al altar. Los votos pretenden acercar al sacerdote a la salvación prometida, y él debe dejar atrás los placeres terrenales. Los votos son tres: Pobreza, obediencia y castidad. Siendo esta la forma de imitar la vida que Jesús llevó en vida.
La pobreza haciendo referencia a que una vez ordenado, el sacerdote no posee más de lo que hay dentro de su corazón. No es suya la casa donde vive, no es suya la ropa que usa, no es suya la comida que come ni siquiera el cuerpo que tiene. (¨ ¿O no sabéis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, que está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? ¨ - 1 Cor 6:19)
Al no ser suyo el dinero que posee, nada le impide dárselo a quien lo necesita. Al no ser suya la ropa que usa, nada le impide dársela a quien no tiene.
El sacerdote solo servirá a Dios, nunca a la riqueza.
La obediencia está en relación a la pobreza, ya que el sacerdote no posee ninguna riqueza, nada lo ata a algún lugar. De ser necesario y si así lo desea el obispo, el sacerdote será trasladado a otra iglesia, donde haga falta él irá.
Imitando así Jesús, dejando las cosas a voluntad de su padre que está en los cielos.
La castidad es también una forma de imitar a Jesús.
El sacerdote no puede casarse, y por consiguiente no puede tener relaciones sexuales. Ya que el celibato (soltería) se relacionó profundamente con ganar el cielo.
Es también uno de los placeres terrenales de los que se deben apartar las manos.
¨Huid de la fornicación. Todos los demás pecados que un hombre comete están fuera del cuerpo, pero el fornicario peca contra su propio cuerpo. ¨ - 1 Cor 6:18
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Sacerdote homosexual
SpiritualEntregar el alma y corazón a Dios, ¿y el cuerpo a un humano?