Pasado un tiempo de aquella tarde, cuando me quede a solas, y los demas ya habian dejado de jugar por ese dia, empezamos a hablar esa chica tan encantadora y yo.
Eran las 7 de la tarde cuando comenzamos a charlar a solas. Estuvimos hablando de todo un poco. Entre hablar y jugar a algún juego con ella, nos dieron las 8 de la mañana, y nos habiamos caído tan bien que quedamos en conectarnos a la 1 del mediodía para proseguir la conversación.
Dicho y hecho, a las 13 horas estábamos los dos ansiosos por hablar el uno con el otro para conocernos mejor.
Ella vivía a casi 500 Km de mi,