la nueva integrante en la pandilla de los cocodrilos

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Después de eso, fuimos al McDonald's y a que no sabéis a quien nos encontramos??
Pues nada más ni nada menos que a mí hermano con el resto de los cocodrilos

Ellos parecieron no vernos, y la verdad me alegro, todavía nos llevamos un poco bastante mal, digamos que el día de ayer fue especial

Nos sentamos en una mesa, cuatro mesas a la derecha de los cocodrilos, nos tocó ir por las hamburguesas a María y a mí, y justamente delante estaban Hannes y Olli

María: Hola Hannes y Olli

Hannes: holaa

Ollie y Nerea: que hacéis aquí?

Nerea: obviamente vamos a cenar, no se vosotros

Olli: igual

María: estáis todos?

Hannes: si, y vosotras?

Nerea: 4 somos y cuatros estamos

Hannes: bueno pues nos vemos luego en tu casa Nerea

María y Nerea: okiii

Y se fueron al igual que nosotras nos fuimos con la cena a nuestra mesa, miré disimuladamente a la mesa de mi hermano y ¡atención! Somos el centro de sus miradas

Cenamos entre risas y comentarios normales en una adolescente y cuando acabamos nos fuimos por la calle haciendo el tonto, las cuatro como buenas amigas que somos

Al llegar a casa, mi hermano y el resto ya estaban allí, yo me despedí de las chicas y a duras penas de los chicos, cuando estaba por entrar alguien me agarró del brazo hasta hacerme girar, y al instante siento unos dulces labios posarse sobre los míos, ese era mi primer beso y estaba en shock, a los pocos segundos reaccioné y le correspondí el beso, el me agarró de la cintura haciendo que me apegase más a el y que el beso fuese más intenso, al separarme por falta de aire me di cuenta de quién era esos labios que se me hacían adictivos

Era nada más ni nada menos que Olli, le dediqué una sonrisa, y el a mí un guiño, el se fue con mi hermano mientras que yo entraba a mi habitación