Dio Brandon padre de Gornio, es un negociante de la mafia quiere ser el jefe de todo esto pero tiene que pasar a Diabolo, lo unico que podria hacer es juntar a la hija de Diabolo junto a Gornio para estar en el poder, Pasione trabaja para Dio.
Se encontraban atrapados en el medio de un tráfico interminable, el sonido de varios claxon se intensificarán de forma molesta, no podía faltar un sin fin de insultos vulgares entre uno que otro conductor. Mista solo se mantenía impaciente, moviendo del mismo modo un dedo sobre el volante, parecía el contador de una bomba a punto de estallar, Giorno mantenía su vista a través de la ventanilla, reposando la mejilla sobre la Palma de la mano...
Trish estaba tan aburrida y desesperada que creía que pasaría el resto de su vida atorado en el tráfico, pero aún encerrada con un chico que no le prestaba atención y un odioso guarura con manos de gorila en su intento por no caer en la locura.
Husmeo un poco entre los asientos, pasándose sobre los delanteros para alcanzar la guantera, en esta revolvió objetos que se puede esperar encontrar tal como baterías, un linterna, documentos del auto y para su suerte, unas cintas, las tomo para inspeccionar los nombres y la que llevaba la leyenda "the carpenters- Close to you" llamo su atención.
-Oye..puedes ponerlo- golpeo un poco el hombro del guardespaldas, el moreno dio un leve brinco y giro a ver que era lo que pedia, se quedo unos segundos asi-Oye no tengo todo tu tiempo..-tomo el cassette y lo introducio al esterio.
Oprimio el boton de play, una vez que la cinta se rebobino, comenzó esa linda melodía de piano, algo alegre y pegajosa, podría haber disfrutado como de costumbre de tan bella canción si no fuera por ese abrumador sonido de los claxon y el tumulto agolpado afuera. No poniendo hacer nada al respecto, Mista prefería centrar su audición en la música, cambio ese ansioso golpeteo sobre el cuero del volante para marcar el ritmo al compás, parecía que la voz gentil de la cantante, dominaba sobre todo el escándalo de los autos, dejó reposar su espalda sobre el asiento, sintiéndose menos tenso, pronto se encontró divagando un poco sobre cada detalle que le rodeaba como algo de polvo en el tablero o si el espejo retrovisor estaba mal ajustado.
A través de éste miró los asientos traseros y a sus pasajeros, parecían tan aburridos como él, sin embargo noto un rostro más melancólico que aburrido en Giorno ¿por qué será que los ricos nunca son felices?
Sin darle mucha razón comenzó a observarlo con más detalle, curiosamente, en ese instante la lírica describia a ese chico rubio de ojos azules ¿los ojos de Girono lo son? ¿o son verdes tal vez? No dejaba de mirarlo a través del espejo, poco a poco la mezcolanza de ruido disminuyó hasta no ser más que música y la imagen del joven Giovanna lo que existía en la percepción de Mista.
No pudo evitar recordar lo ocurrido apenasas temprano, su intromisión en la privacidad del rubio y su inminente vergüenza al contemplar su desnudez, que debió venir como un recuerdo bochornoso pero se le manifesto parecido a algo grato, encontrando algo de lascivo en aquella idea pareció que su mirada proyecto su sentir pues aquel que tanto como a con los ojos, pareció notar su pesada vista.
Estaba por finalizar la melodia cuando los coches avanzaron, Mista cambio su ojos al frente y tomo el volante, ese ambiente habia cambiado, dejaron de sonar el sonido molesto de los autos, esas palabras vulgares que decian.
Estaba por finalizar la melodia cuando los coches avanzaron, Mista cambio su ojos al frente y tomo el volante, ese ambiente habia cambiado, dejaron de sonar el sonido molesto de los autos, esas palabras vulgares que decian.
Estaban ya por llegar a las tiendas, habia gente caminado, la mayoria era de dinero, mujeres muy bonitas pero a veces se les notaba que si cuerpo no era el todo natrula, Mista miro todos los lugares para estacionar, todos estaban ocupados, hasta que vio uno, el lugar era algo estrecho, por poco no cabía.
Salio del coche mista para abrirles la puerta a lod dos adolecentes, tomo la tapa de la puerta para abrir, le dio la mano el guardaespaldas, la pelirosa se quedo quieta por unos segundos, hizo un gesto de asco por que deberia tomar las manos de un gorila es lo me pensó, salio del coche dandole la espalda a Mista y Giorno.
El rubio aceptó la ayuda, su mano tan frágil rozando con la del moreno que es tan brusca, a los dos les costaba verse a la cara, sus miradas cambiaban de dirección pero a veces regresaban al mismo sitio esos ojos tan oscuros y profundos hacian que el rubio se sintiera un poco asustado pero a la vez protegido, lo levanto del coche, cerro el coche.
─Bien, vamos...tenemos que elegir los colores de la boda ─dijo Trish caminando hacia la tienda de diseño, los otros dos la seguían, la gente ponia su mirada en giorno, no habian visto con esa figura tan perfecta y mas por esos cabellos dorados.
Llegaron al lugar era grande lleno de todo tipo de papeles, colores llamativos, presentaciones de tarjetas para bodas o fiestas, había de todo, una mujer esbelta, alta, con un tono de piel mascabado, sus ojos aparecidos como la miel y cabello ondulada apareció.
─¿En que les puedo ayudar? ─ se acerco a los chicos, su manera de caminar dejaba con la boca abierta.
─ Queremos un diseño de bodas, el mas detallado que tengas ─lo dijo de una manera sintiendose superior a ella, no podía dejar de mirarla, se sentia un poco celosa por ls figura que tenia.
La trabajadora estuvo buscando unas invitaciones detalladas, tardo unos 5 minutos hasta que salio del almacén, acomodo una por una para que las vieran, eran hermosas con un detalle fino, de verdad una diseñadora podria hacer esto, Trish tomo el brazo de Giorno jalamdolo hacia ella.
─ ¿Cual te gusta? ─ dijo trish, el rubio se puso a ver todas, eran bonitas pero realmente no quire esto, quiere ser libre sin ser forzado a casarse con alguien que ama, seguia viendo pero no se decidia se sentia molesto y un poco triste, en eso la empleada le dijo.
─ ¿Por que no eligen esta? Es adecuado para ustedes ─ tomo la invitacion tenia un diseño de rosas rojas y amarillas, con un fondo blanco matequilla con un moño grande azul.
─ Esta bien esa ─ Giorno lo dijo sin una importamcia solo queria irse de ese lugar o mas bien queria desaparecer que nadie lo encontrara.
Temino de pagar Trish, la empleada les dio el paso para que salieran con una despedida muy educada, al dar el paso afuera varia gente se acerco, mujeres y hombres con camaras y microfonos, habian visto a Trish, era famosa por su riqueza y su belleza, mientras tanto los dos chicos fueron apartados no podian ver a Trish.
Paso un chico corriemdo pero sin querer empujo a Giorno haciemdo caer en los brazos de Mista, sus cuerpos estaban tan cerca, el cuerpo tan fino de rubio junto al cuerpo brusco de moreno parecia como si encajaran bien como si fueran un rompecabezas.
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