¿Estaba nervioso? En efecto ¿Quería vomitar? En efecto ¿Su madre le daría un golpe por tanta vuelta que daba? Eso ya estaba hecho.
-Mark Yi En Tuan ya deja de estar dando vueltas, empiezas a marearme, cálmate de una vez- Le recrimino la mujer que más amaba en el mundo y a la que más miedo le tenía.
-Pero mami-
-Nada, ahora ven que te voy a acomodar la corbata, otra vez.- Cuando su pequeño retoño se acerco a él, no pudo evitar suspirar y darle un pequeño golpe en la frente antes de acomodarle la corbata. -No se en que momento Jinyoung acepto casarse contigo.-
Mark alzó los labios tratando de realizar un puchero ante la queja de su madre, pero ella tenía razón, debía calmarse, en un par de minutos iniciaría la boda. Para tratar de calmarse, empezó por recordar como había llegado hasta ese día.
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Lo había planeado durante muchos meses, todo debía ser perfecto. Pero no contaba con que el anillo que mando a hacer se lo dieran un poco más pequeño de lo que debía ser o que el restaurante que había reservado justo ese día lo clausuraran. Todo estaba en su contra.
-Oye, no te desanimes, esta cita ha sido bastante rara, si, pero siempre me gusta salir contigo- Las palabras de Jinyoung de cierta manera le calmaron, pero aun así no podía evitar enojarse.
Estaba decidido a reorganizar todo su plan para tener la propuesta perfecta, pero mientras admiraban la torre Eiffel, no pudo evitar observar el rostro de su novio y sonreír cual idiota enamorado.
-Jinyoung- El mencionado volteo mientras tenía una pequeña sonrisa en sus labios- Cásate conmigo.
-¿Qué?- El coreano no podía creer lo que estaba escuchando, estaba en shock, incluso cuando el contrario se hinco frente a él no podía creer lo que estaba pasando.
-Se...que no es la mejor manera de pedirlo y que puede parecer un poco cliché mientras estamos bajo esta torre, pero no pude evitar enamorarme un poquito más en cuanto vi tu rostro. Me he enamorado por tu belleza, me he enamorado porque siempre haz estado conmigo, cuando estoy feliz o triste, me he enamorado porque me has apoyado a pesar de que no siempre estas de acuerdo con mis decisiones y me he enamorado porque contigo soy feliz. Por eso quiero verte a mi lado todas las mañanas. -Sacó una pequeña caja azul marino donde en su interior había un precioso anillo de plata- ¿Te casarías conmigo Park Jinyoung?
El coreano se sentía desmayar. El algún momento de su relación con el mayor pensó que terminarían juntos hasta ser ancianos, pero jamás creyó que se sentiría tan feliz como en esos momentos.
París, la ciudad del amor, donde una gran estructura de hierro se alza a la orilla del río Sena, fue testigo del pacto de amor entre ambas personas que se amaban con locura.
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La marcha nupcial empezó a resonar por aquel salón con adornos blancos y dorados, los invitados voltearon para ver a la pareja de novios entrar.
Los familiares de ambos estaban reunidos para ver y apoyar a la nueva pareja. Ambas madres limpiaban sus rostros, donde pequeñas lagrimas caían de sus mejillas. La madre de Jinyoung no podía estar más arrepentida de haber intentado terminar la relación que tenía con su nuevo yerno. El rostro de su hijo estaba resplandeciente por la felicidad, la sonrisa que mostraba al sostener la mano del mayor, era la más hermosa que ella jamás vio en su retoño.
Los chicos del grupo estaban feliz de ver un paso más en la vida de sus compañeros, en especial porque ellos fueron los que vieron la evolución de estos desde que empezaron.
Jaebum le tendió un pañuelo a su precioso novio, este no podía parar de llorar de la felicidad. El líder paso su brazo por sus hombros para darle apoyo, apretó con suavidad su hombro derecho y le regalo una pequeña sonrisa, que hizo a Youngjae sonrojarse. Sabia que significaba esa sonrisa por lo que dejo de llorar y disfrutar de la pequeña ceremonia que se estaba realizando.
Finalmente cuando se colocaron sus anillos después de decir sus votos, el padre exclamó la ansiada frase.
-Los declaró marido y esposo, pueden besarse-
Los aplausos y chiflidos, por parte de Bambam Y Yugmyeon no se hicieron esperar y por más vergüenza que les diera a los recién casados la actitud de sus amigos, no podían estar más felices.
Al final las risas, las tristezas, los enojos y los dramas de novio, eran parte de su vida.
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Muchas gracias por el apoyo y amor que le dieron a esta historia, me hubiera gustado actualizar antes pero mi titulación y nuevo trabajo no me dejaron.
Nuestro último capitulo con esta pareja de idiotas pero que amo muchisimo. He estado planeando un futuro Markjin pero aun estoy revisando la trama de la historia, esperenlo.
Las amo muchisimo y muchas gracias.
