La lluvia caía sinuosa y rauda, era una noche de tormenta.
Todo el orfanato parecía estar silencioso, puesto que el único sonido perceptible era el de las gotas estrellarse contra el techo y el suelo.
Se encontraba en un espacio pequeño, acurrucado y con las manos inquietas.
Casi como un tic nervioso, su dedo empezó a enrrollarse y desenrrollarse en el mismo mechón del pelo albino.
De acuerdo, lo sabía y estaba conciente, el cesto de la ropa recién lavada no era precisamente el mejor escondite ni tampoco el tipo de lugar donde los "genios" se van a esconder, pero... bueno, esa noche el agua lo había agarrado desprevenido.
Asomó su cabeza, como un conejo que revisa su entorno para comprobar que no hay depredadores cerca.
- ¿Quién está ahí ?- preguntó con voz temblorosa el albino, juraría que había visto algo o a alguien moverse.
Sin respuesta.
Tal vez había sido su imaginación, en ese tipo de noches su intelecto parecía mudarse a algún recondito lugar de su cerebro y quien se encontraba ahí solo era un chico, un niño...temeroso de la tormenta.
- No deberías dejar la puerta abierta, Near
Como si de una película de terror se tratara, una voz que lo estremeció de pies a cabeza había susurrado esas palabras cerca de su oído.
Instintivamente trato de alejarse de un brinco, pero puesto que se encontraba acurrucado dentro de un cesto, lo único que logro fue un movimiento torpe que término por tirarlo junto con su escondite.
Siendo sepultado por un montón de camisas y pantalones blancos- Pfft- parecía que la "voz maligna" trataba de controlar su risa- ¿Te espante, Near?
Aún sin salir de entre las ropas, el albino sabía perfectamente quien le hablaba, y a pesar de que debería enfadarse (y lo hubiera hecho de no ser por la lluvia) una gran parte de sí se encontraba bastante aliviada, su corazón latía fuertemente en su pecho y no precisamente por el susto que le acababa de dar ese chico rubio
- ¿Near?
Al no recibir respuesta, la burla en su voz desapareció para pasar a un tono preocupado.
¿Y sí se había golpeado la cabeza por su culpa?
- Near no está aquí- susurró una voz cavernosa de entre el nido de ropa- ...solo su cadáver
Y de repente el que se encontraba en el suelo era Mello que había sido repentinamente atacado por cierto albino, cuya cara era todavía cubierta por una de sus camisas.
Le había saltado encima por sorpresa y lo abrazaba ligeramente por la cintura.
- ¿"Solo su cadáver"?, esa es una pésima broma, Near- dijo quitándole la prenda que le impedía ver su rostro
- Pero aún así te asustó, vi tu cara de terror- respondió triunfalmente el más pequeño
Un ligero sonrojo invadió las mejillas del rubio y se limitó a acariciar gentilmente la cabeza de Near, que ahora se encontraba más que cómodo acurrucado entre sus brazos.
- Cualquiera se asustaría si una pelusa salvaje le salta encima de repente- trató de excusarse- además, mira a tu alrededor, este es el ambiente más terrorífico que he visto en mucho tiempo así que es obvio que...
Un tierno beso interrumpió lo que serían las larguísimas excusas del mayor.
Si bien era Mello el que normalmente lo callaba con ese método, podía darse por una vez el lujo de intentarlo y robarle más de un aliento a esos labios chocolate.
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De Tormentas Y Promesas Para El Futuro [MeroNia]
FanfictionUna tormenta no es el escenario más romántico Ni la escena épica de una confesión. Pero ambos sabían que dentro de poco sería un día especial... -> MeroNia -> Fic creado para celebrar el cumpleaños de Near