Make you feel my love || l.s Oneshot.

Hacerte sentir mi amor.

*Reproducir en toda la historia la canción “Make you feel my love” de Adele.*

El cielo pintaba grisáceo, la lluvia caían con toda su fuerza. El día no podía representar mejor su estado de ánimo. Las calles estaban mojadas de la lluvia, su ventana estaba empañada, y su cuerpo hecho una miarda. Estaba tirado en su cama, no tenía ganas de nada, después de todo, ¿Quién tiene ganas de hacer algo, cuando tu novio de hace 5 años, te ha terminado por alguien “Mejor”?

EXACTO. NADIE.

Se acomodó mejor en la cama y miró hacia el techo. Esos 5 años de amor se habían ido a la mierda; Patrick, su no… Ex novio, le había enamorado una tarde soleada de verano. Él y toda su familia habían ido a la playa para un fin de semana “Familiar”; Como todo Joven adulto se separó de su familia y caminó por las playas, sintiendo la arena en sus pies y las cosquillas que la espuma dejaba. Ahí fue cuando se percató del guapo Guardavidas.

Era un hombre alto, esbelto y de músculos bonitos. Se le hizo agua la boca y se acercó al chico; descubrió que se llamaba “Patrick Stich” y que estudiaba en su misma escuela, solo que un año más adelantado. Pasaron las tardes siguientes platicando y conociéndose.

Unos meses después, lo inevitable llegó. Cayeron enamorados. Louis de Patrick. Patrick de Louis. Pero no todo es miel sobre hojuelas, al menos no lo había sido para Louis Tomlinson.

Con 3 años de edad, fue dejado al cuidado de sus tíos paternos, ya que sus padres murieron en un accidente. Cuando tenía 10 años nadie pudo asistir a su fiesta de cumpleaños, mismo que él había planeado y organizado. Quedó destrozado. Ahora con 25 años, su novio, “EL AMOR DE SU VIDA” lo había dejado por alguien de mejor aspecto. Cuando tenía 13 conoció a su mejor amigo en toda la vida: Harry Styles.

Un chico guapo para su edad, con el cabello lacio y planchado, era el típico niño ridículo, pero ridículo bonito. Se conocieron en el centro de la ciudad, cuando el castaño había sido rechazado por una niña. Su conexión fue instantánea.

Con el paso de los años Harry, siempre estaba a su lado; Cuando lo rechazaban, cuando se sentía mal, cuando lo echaron de su casa por ser gay, cuando compró su primer apartamento. Cuando fue golpeado en la universidad. En cada suceso de su vida, Harry Styles estaba ahí para él. Sin duda, ahora con 24 años, era muy guapo.

Tenía un cuerpo trabajado y bronceado, su cara ya estaba madura y muy sexy. Sus labios carnosos y rosas, sus ojos verdes, su sonrisa de muerte; Incluso hasta sus estúpidos tatuajes. Todo en él era lindo.

Escuchó el sonido del timbre, y maldijo a aquel ser inmundo que se atrevía a sacarlo de su capullo de dolor y tristeza. Se limpió las lágrimas, que aun corrían por su cara, y se dirigió a la puerta. Estaba listo para insultar a aquel que lo interrumpió, pero se vio envuelto en un abrazo, un abrazo que reconocía; esas manos grandes y cálidas. Esas que lo tomaban de la mejilla o la mano, esas que le acariciaban el cabello mientras se recostaba en el sofá. Era Harry.

-¿Cómo estás?- habló aun en el abrazo

-Bien, supongo. ¿Quién te dijo?-

-Zayn me llamó. Él presencio todo. Me dijo que estabas muy mal- se despegó un poco.

El castaño asintió y dejo a su mejor amigo pasar. Cerró la puerta tras ellos y caminó hasta su habitación. Escuchó los pasos de su mejor amigo y le indicó que se acostara en la cama, su amigo obedeció. Regresó del baño y se quedó en la puerta un momento, repasando esa imagen en su cabeza; su mejor amigo, acostado en su cama, con un brazo en su cabeza y unos ojos muy brillantes. Algo en su estómago se removió.