Final

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Decidieron comprar otra casa. Una más pequeña y con solo dos habitaciones. Jungkook dijo que no quería vivir donde Taehyung estuvo con Alanna. Llevan dos años viviendo aquí. Es acogedora, de color café claro y bastante fresca.

Jungkook gruñe, sintiendo algo contra su muslo. Abre los ojos y sonríe.

—Mmm, Daddy. —se muerde el labio, sonriendo.

—Daddy quiere jugar, bebé.

—Yo también quiero. Mmm.

La erección de Taehyung se frota entre sus glúteos. Se siente dura y lista para follarlo.

Hace un mes atrás había llegado el pequeño Jungwoo. Un bebé de apenas tres meses. Su madre murió unas semanas después del parto por una fuerte infección en la herida de la cesárea. El trámite fue bastante rápido. Taehyung y Jungkook estaban encantados con su hijo. Pero como todavía es pequeño, tienen que levantarse por las noches a atenderle, dejándolos cansados. Entonces, hace un mes que no hacen nada, y eso estaba matando al más grande.

—¿Serás un buen bebé? ¿Obedecerás a todo lo que Daddy diga?

—Sí, Daddy. Siempre.

Jungkook se voltea y besa los labios de su novio. Primero es un movimiento temeroso y vacilante, pero Taehyung no aguanta, abre los labios y mete su lengua a la boca de Jungkook, haciendo que suelte ronroneos, pasando sus manos por el estómago de Taehyung.

—Daddy te va a follar la boca, bebé ¿qué tal suena eso?

El castaño simplemente tararea feliz con esa idea, poniéndose de rodillas en el suelo. El rubio se para, en sus pantalón de pijamas sobresale su erección. Jungkook se lame los labios, esperando por esta. Baja sus pantalones lentamente. La punta golpea la barbilla del menor, él la toma y comienza a masajearla, robándole suspiros al mayor.

Taehyung agarra la base de su miembro, indicándole a Jungkook que abriera la boca, él, obediente como siempre, lo hace. Mete su polla hasta que topa la garganta de Jungkook. Sus ojos se cristalizan y sus manos paran en las caderas de Taehyung, apretándolas, sus dedos quedan blancos por la fuerza.

—¿Sabes tus palabras de seguridad?

—Sí, Daddy. Estoy bien. —él solito se mete el pene de Taehyung hasta el fondo.

Taehyung gime grueso cuando ve pequeñas lágrimas salir de los ojos de Jungkook. Por su barbilla caen tiras de saliva combinadas con su pre semen.

—¿Vas a tragar todo lo que Daddy te dé, bebé?

Jungkook como puede asiente, cerrando sus ojos. El rubio comienza a mover sus caderas lentamente para no lastimar al otro. No pasa tanto y ya está follando su boca. Los dos están gimiendo. Taehyung por lo caliente que se siente la boca de Jungkook y Jungkook por la rudeza del otro. Le encanta que se volviera bruto al momento de estar haciéndolo.

Taehyung se vacía en la boca del más joven. Jungkook saca la lengua, mostrándole el líquido viscoso y blanco. Le guiña un ojo antes de tragárselo todo, ante la vista llena de lujuria del rubio.

—Tengo un regalo para ti.

El castaño vuelve a respirar normal cuando Taehyung se aleja. Camina, con pasos siempre elegantes hasta el armario. De ahí, saca una caja negra, dentro es aterciopelada y de color rosa pastel.

—Acuéstate boca abajo.

Ordena con voz demandante. Sonríe al ver el más reciente tatuaje de Jungkook. El también lo ha escrito y dice “Taehyung" justo debajo donde termina su nalga derecha, está totalmente mal hecho porque fue de una vez que estaban lo suficientemente borrachos -y algo drogados- para hacerlo.

TODO POR DADDY. ➸taekookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora