capítulo 3 Amaya.

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- me siento como una basura, te extraño tanto Tsukasa, no sé en qué momento pude perder el control, siempre me voy a maldecir por haberte asesinado, te quería mucho, me gustabas demasiado, y mira lo que te hice, debí haberme quedado en esa cárcel a pudrirme como el resto de los demonios que comete homicidio - pensaba mientras estaba en su habitación, daba vueltas en su cama una y otra vez, miró su reloj de cabecera y marcaba las 2 de la mañana, sin poder dormir bien, se levantó y salió a mirar la fresca noche, cuando se topó con Hans Lee que también tenía insomnio.

- vaya al parecer no soy el único que no pudo dormir esta noche - se dibujó una sonrisa ladina.

- si, es que, no sé, el recuerdo de Taira me persigue cada vez más, quisiera olvidarla en verdad pero no puedo, es como si tuviera una espina atravesada en mi corazón -

- eso sonó bastante romántico para ti, como te lo dije ayer y te lo reitero debes aprender a dejar ir a Tsukasa, ella querría que estuvieras bien, hay más peces en el océano cierto?? - sonrio sin mirarlo.

- cierto...- se quedó mirando a la nada.

Unas noches después

- han pasado varios días desde que el demonio atacó por última vez, no hemos recibido noticias de nueva cuenta sobre feminicidios - la rubia fumaba un cigarrillo despreocupada en la barra.

- eso no significa que no esté por ahí oculto, quiere esconderse un rato porque ya sabe que lo tenemos localizado- Sawasaki se notaba serio.

- cierto, crees que Anzai pueda atraparlo esta vez - Jill lo miró fijamente.

- pues eso espero, ha estado un poco distraído, y lo entiendo es normal debido al trauma que llevo, fue muy fuerte al no suicidarse otro vampiro lo hubiera hecho - yanagi leía un informe en el periódico local.

- conozco a Yuki, para él, el seguir viviendo con ese dolor es como cargar su propia cruz de calvario, se esta castigando por lo de su princesa -

- si, es eso creo -

- aunque ha mejorado bastante no se ha transformado a pesar de que ha estado expuesto a enfados y cerca de mujeres en algunas escenas del crimen - explicaba Yanagi.

- Anzai es fuerte, solo que necesita tiempo, tal vez si conociera a otra chica se le olvide un poco lo de Tsukasa - apareció Lee comiendo una hamburguesa.

- Yuki no se volverá a acercar a una mujer, lo conozco y lo va a cumplir, le dolió lo de esa jovencita- la rubia espetó con firmeza.

- ya veremos, dejaremos que pase un tiempo y si no yo mismo lo animare, además el doctor Kano estará de regreso mañana por la noche, y él puede ser de gran ayuda para quitarle esa depresión que tiene Anzai.

Todos lo miraron que tenía una leve sonrisa bribona, pero no dijeron nada.
Un rato más tarde bajo Yuki, con semblante un poco demacrado por no haber pasado buena noche igual que siempre, los surcos violácelos que traía debajo de sus ojos se marcaban aún más debido al insomnio.

- que hay!! Iré a caminar, regreso en un rato -

- Yuki, porque no vas a ligar por ahí, hay chicas lindas -

- deja de decir estupideces Jill no me hagas gastar mi saliva o insultarte - iba a salir con el ceño fruncido pero Yanagi lo detuvo.

- Anzai espera! No has usado ningún sedante? -

- ya no uso sedantes solo usaré tranquilizantes, y no, no he usado ninguno afortunadamente y espero siguir así- se giró para irse del lugar.

- sigue depresivo - habló Jill con cara de decepción.

Devil's line un nuevo amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora