I
Sentada en aquella banca,
Con su sonrisa de siempre,
Sigue siendo la nieve blanca,
Que permanece en mi mente.
II
Podría comerte a besos,
Podría imaginarme a ti,
Podría causarte miedos,
Y cuidarte como un colibrí.
III
Demasiada oscuridad abunda en mi mente,
Necesito una luz, una luz que me alumbre,
Tal vez la tuya amor mío, la que mas deslumbre,
Aquella luz, si, tu luz, que siempre esta presente.
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Por ti hasta pondría mis manos en tu fuego
RomancePor favor, no te vayas, aun no he terminado de verte.