Única Parte

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Los únicos momentos de felicidad han sido escasos en mi vida, se podría decir que los cuento con la palma manchada mano, y sí, a manchada me refiero a sangre de mis víctimas. Calma no se asusten...
Un de mis más grandes logros ha sido, conocer al Amor de mi vida que es mi esposo y mejor amigo, testigo de todo lo que he realizado en mi vida desde que tenía 15 años...

El me a visto caer y levantarme sin la ayuda de nadie, a sido testigo de mis más sinceras sonrisas, de mis llantos más dolorosos, de mi enojo y de razonamiento al momento de empuñar el arma.

Otro -y el más importante- son mis hermosos hijos, Jessica y Andrés.
Estos niños son nuestra viva imagen, Andrés es igual a su padre, la forma de caminar, la de hablar, e incluso hasta la de dormir, es increíble cómo pueden ser la viva imagen de lo que más odiamos en un pasado junto a mi Esposo. Por otro lado...Mi linda Jess, es mi silueta, mi retrato en vida, la manera de reír, mis mismos hoyuelos, su pelo negro y lacio, sus ojos tan negros, la forma en la que determina las situaciones. Idéntica a mí a los 16.

Cada noche Jessica y Andrés, nos piden que les contemos una historia, Nuestra historia, la Narración misma de la familia Palmer Johnson. Y claro, nuestros hijos saben muestro pasado, guardan el secreto.

Mami, Mami, ya es hora de dormir -repetía constante Jess-

Vamos mamá, siempre lo haces, porfavor -Ponía en forma de súplica sus manitos el pequeño Andrés-

Suelto una leve carcajada y les digo que subo enseguida.

Nuestra vida después de los 20 fue plena y grata, culminamos carrera, Yo como psicóloga y Matthew de Forense. Al final y al cabo eran una de las tantas cosas que se nos daban bien en nuestra anterior "profesión".

Subí con lentitud y calma a la Habitación de mis pequeños, ya estando a sus lugares, me repiten -Mami, nos cuentas un cuento-
Yo sabiendo perfectamente a la historia que se referían, aún que ellos sabían que no era una historia de amor complemente, les encantaba. 

"Había una vez, una adolescente que cayó en una horrible depresión, las cosas no estaban bien para ella, ni en su institución, ni en su familia

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"Había una vez, una adolescente que cayó en una horrible depresión, las cosas no estaban bien para ella, ni en su institución, ni en su familia. Su madre se había separada recientemente y ya tenía a otra persona viviendo con ellos, cuando acabaría la búsqueda de su madre en una pareja idea, se pregunta aquella joven de apenas unos 16 años. Alicie nunca Tuvo una infancia decente, entre golpes y sangre creció la pequeña,  proporcionadas por el padre de sus hermanos, los cuales ella amaba con el alma. Muchas veces Alicie tuvo que dar su cuerpo a cambio de que aquel horrible hombre no le hiciera nada a su pequeña familia... Asqueada la joven lloraba cada vez que rozaban su piel, así pasaron las cosas hasta que ella tuvo edad suficiente para acabar con ellos, y no, ella no se suicidó, si no que tuvo la idea de tomar la oportunidad que le había Dado su tía, mejor conocida como -Celina- Ella era viuda de un de uno de los mercenarios más buscados en todo el jodido país. Celina sabía de la destreza con la que su Sobrina había sido dotada, la habilidad de mantener la calma ante todo, la seriedad apesar de su corta edad, los cambios de personalidad que tenía a través de las situaciones, en pocas Palabras Alicie era perfecta para convertirse en la Siguiente mercenaria más buscada. Alicie con 15 años mató a su despreciable padrastro con cianuro en el vino, mato al pobre viejo sin remordimiento alguno. Y ese solo era el comienzo para el Placentero legado de Alicie mejor conocida como La Maldita Johnson.

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⏰ Última actualización: Sep 06, 2019 ⏰

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