Out of the shadows * MALEC * TERMINADA

El hijo perfecto

He aquí una pequeña historia MALEC, por ahora están considerados dos capítulos, si la inspiración da más, quizá sean tres partes.

Recientemente me incorporé al mundo de Shadowhunter, hace una semana terminé la serie y leí (hace un par de años) hasta el libro 3, así que por favor si ven variaciones de la historia, discúlpenme no es una versión 100% apegada al maravilloso universo de C.C.

Esto surgió de las escenas MALEC en la serie ¡Amé a este dúo totalmente!

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ALEC POV

Me gustaba la noche, me encontraba mirando por la ventana de mi habitación las estrellas y la luna.

En general me sentía cómodo en la oscuridad, eso me habían enseñado desde pequeño, como shadowhunter mi mejor amiga era la oscuridad así que aprendí a reconocerla, aceptarla y no dejarla ir.

Toda mi vida había pasado inmerso en el mundo de sombras, mi misión era protegerlo, mantener a raya demonios y subterráneos, lo cual dejaba poco tiempo para mí y no era que me importara, ya que el entrenamiento y ser el mejor era el objetivo de mi vida, así como hacer sentir orgullosos a mis padres.

Como primogénito debía mantener el honor de la familia Lightwood, que tenía décadas y décadas colocándose como una familia con los mejores shadowhunters y yo no debía ser la excepción, al contrario, debía superar las expectativas, ser el mejor.

Así que había pasado mi vida luchando contra las expectativas que mis padres creaban para mi, al principio peleaba sin descanso, sin pensar, solo lo hacía, no lo cuestionaba, pero llego un momento en el que sentía que me asfixiaba, me sentía desesperado ya que nunca obtenía el reconocimiento de mis padres, sumando a esto, había otro secreto oscuro que manchaba mi alma: mi amor por mi parabatai.

El amor de hermanos, no era malo, claro que no, Izzy me había enseñado eso, pero mi amor por Jace, iba más allá a una hermandad, era un amor en el sentido de pareja, lo cual quemó mis entrañas e intenté eliminar por dos razones:

Primera, los shadowhunter homosexuales eran mal visto en la sociedad.

Segundo, Jace era totalmente heterosexual, no había ninguna oportunidad y no arruinaría una relación parabatai por sentimientos como esos.

Cuando cumplí la mayoría de edad, me sentí atrapado, sin salida, como si nadara contra corriente, pero nunca pudiera sobrepasarla, no podía cumplir las expectativas de mis padres, al contrario, cada vez se hacían mayores y más absurdas.

En ese momento de mi vida solo quería gritar, pero no podía escapar ¿Qué imagen dejaría para mis hermanos? No podía dejarles la carga de la vergüenza de haber huido así que soporté.

Y vaya que soporté, incluso, mis padres quisieron casarme, Lidya no era una mala persona, solo que la relación que llevábamos era fría e indiferente.

Al principio acepté el compromiso ya que por primera vez en la vida vi a mi madre sonreír y mirarme con orgullo, sentí como si por fin llenara las expectativas, me hizo sentir satisfecho.

No opiné, en realidad, solo escuchaba los planeas de ambas familias mientras mantenía una sonrisa falsa en mis labios, todo en mi vida se había vuelto falso, había olvidado la última vez que había sonreído genuinamente. Sentía mi cara de cartón, rígida, mis gestos eran ensayados y fingidos.

Después de un par de semanas, todo estaba minuciosamente planeado: la fiesta de compromiso, la fecha de la boda, como ambas familias se beneficiarían de esta unión.