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Las ventas estaban cerradas pero el sol dejaba ver todo lo que pasaba en esa habitación.
Se podía ver a un chico frustrado mientras dibujaba el rostro de alguna persona, pero aquel "boceto" siempre quedaba en blanco
Y el chico solo quería darle un golpe al lienzo.
-Esto es tan frustrante..- el pelinegro dio un suspiro y lanzó los lápices alguna parte de la habitación para luego salir de ella.
Lee jaeno es un gran "pintor" (según él mismo), sus pinturas contaban unas lindas historias, su debilidad eran las flores..siempre las dibuja. Pero esta vez el chico quiere lograr un nuevo objetivo
Dibujar el rostro de alguna persona.
Era un gran reto para él, jamás de su mente se le pasó la idea de crear el rostro de alguien detalladamente, ya que, siempre prefiere los paisajes o las flores.
Y pensarán "¿porque no dibuja el rostro de uno de sus amigos?".
Jeno no quiere hacer algo básico, el quiere tener una propia musa, que cada vez que la vea quiera pintar en ella* o sobre ella*, que con solo pensar en ella* su mente pueda crear miles de obras solo de ella*.
No solo una musa..el solo necesita amor.
A pesar de ser un "gran pintor" por estar tan cerrado en su mundo de lienzos y pinturas jamás le quiso dar la oportunidad al amor.
Sus amigos, ellos eran los únicos que le brindaban amor... y estaba agradecido por eso pero al final de cuentas ese no es el amor que él necesita.
Se lanzó en el sofá y tomo algún cojín para luego darle golpes a éste, estaba harto de que su creatividad estaba disminuyendo, que sus ganas de dibujar estuvieran tan nulas.
Sentía sus ojos lagrimear un poco, tomo el cojín para cubrir su rostro y lágrimas comenzaron a caer. Jeno era tan débil.
El teléfono comenzó a sonar y el pelinegro algo somnoliento se fue a buscar, llorar y después dormir se estaba convirtiendo en una rutina para el.
Tomó el teléfono, sonrió al ver de quién era la llamada.
-Hola renren ¿qué pasa?- mientras respondía la llamada se dirigió a su habitación.
-hola..¿como anda tu "inspiración?- la pregunta hizo sentir algo amargado a jeno, el chino sabía cómo se encontraba su amigo en estos momentos pero tenía que hablar con el.
-Pues..esta nula, no hay nada que pueda pintar desde que decidí hacer aquella pintura- un suspiro salió de sus labios.
-oh..sabes para eso debes distraerte un poco- el pelinegro rodo los ojos- y se que no te gusta la idea de salir de tu casa pero necesito que vengas a un lugar conmigo.
-¿porque no va tu novio contigo?- una risita se escucho al otro lado de la línea.
- el sí irá, pero queremos que tu también vayas, vamos será divertido.
Jeno lo pensó un poco ante la idea de salir de su casa y tomar algo de aire fresco..pero eso implica estar con los dos tortolos.- no quiero ser la tercera rueda para ustedes.
-Un amigo mío también irá..- escucho como la voz de renjun era opacada por otro persona.- ¡hola jeno!..tienes que ir, siempre te la pasas en tu casa encerrado y ¡eso no es bueno para tu salud!.
Una pequeña risa salió de sus labios al escuchar el regaño de jaemin- bien, iré.. ¿a qué hora?.
-A las 8:30..- los dos enamorados contestaron al mismo tiempo, a veces el pelinegro les tenía envidia.
