Después de tanto tiempo no se pude respirar algo que no fuesen tus suspiros, la luna cambió sus formas y no volví a escuchar tus dulces deseos una noche más, aunque siempre fuiste de momentos lograste hacerte permanente en mis recuerdos, se que no fui alguien tan simple pero me aceptaste con todos mis defectos para hacerte soberano de mis anhelos, poco a poco te nombraba más en mis deseos, para que un día ni un adiós me dijeses y conseguir el porqué fue como darle cura al dolor que tuve en mi pecho durante cada noche. Me estoy arrancando a rasguños tus recuerdos de mi y se que me expuse mucho a ti pero esta es mi pena por confiarte mucho más de lo que podías dar, si volvieses no te podría aceptar, la mancha que dejaste en mi conciencia solo se quito con mal sueño, ahora que tengo ojeras no te quisiera escuchar y menos ver, el alma que hay en mi se hizo de hielo por el calor que no brindaste, ahora que soy así no te tengo rencor, me lo tengo a mi por permitirte hacer y deshacer. Fuiste el fundamento de las cosas que pienso ahora y aún así no te mencionaria porque mis ideas son solo mías como lo soy yo de mi, no quiero que me pidan más de lo que no soy porque lo que hay en mi no llegaría a los demás, tan solo las palabras que salen de mi boca. Si por alguna razón te logro dar un poco aliento no pienses que fue fácil, y tu que crees que será tan fácil no lo es, porque confiar en entregarte como si fueses un regalo, es como abandonarte.
En el momento que te das a ti, te pierdes porque te dejaste a ti por alguien más, alguien que te puede abandonar y puede que no lo haga pero, me demostraron que esa no es la verdad, la verdad es que me entristece no poder recuperar lo que perdí de mi.
