Mi vida paralela

Capitulo 7

Capitulo 7

Era ya de noche, yo estaba en el medio del bosque, a oscuras para

los mortales, y con un reflejo como de la luna. Mire a mi alrededor y

cuando soplo un viento suave y templado cerré los ojos. Se estaba

tan bien...no me sentía para nada taciturna simplemente me sentía

como en una nube, como si estuviera flotando...

De repente oí a alguien acercándose poco a poco, abrí los ojos sin

pensármelo dos veces, me di la vuelta y vi que Vlad estaba a 50

metros de mi. Instintivamente me relaje y sonreí ¡Estaba aquí!

Aunque... no me había llamado ni enviado un mensaje...

Me acerque y le abracé con un cariño bastante raro en mi. Me aleje

un poco para ver su expresión por el hecho.

Le mire la cara y su cara reflejaba alegría, picardia y algo que no

supe describir. ¿en que estaría pensando para poner esa cara?

Solo el lo sabia, como era lógico Le volví a sonreír y él

instintivamente me acaricio el rostro y se acerco mas a mi.

En mi cabeza sonaba la canción American Boy de Estelle. Vlad me beso suavemente, sin exigir algo a cambio ni ir mas allá del simple beso suave y dulce, incluso cálido y con amor.

Instintivamente cerré los ojos y cuando termino ese beso abrí los

ojos y sonreí

– Si lo se vengo antes-dijo con un tono pícaro repitiendo lo que dijo anoche- ¿o me lo vas a

negar?

– Yo...yo...te extrañaba

– Ya lo veo que me extrañabas- dijo siguiendo el tono

picajoso-.

-¿Te apetece que entremos en mi casa?

Vlad se quedo pensativo. Y en un abrir y cerrar de ojos sin darme

cuenta me cogió en brazos y me llevo dentro de mi casa. Me cojio

de sopetón cuando lo hizo. Mire su pecho que estaba cubierto por

su camiseta, al siguiente instante le mire a los ojos. Me sumergí en

ellos, esos ojos verdes cobrizo me tenían que decir que planeaba

hacer. Intente incorporarme pero fue tarea inútil, estaba aferrada a

sus brazos que eran como dos brazos de hierro, imposible de

mover. Ya dentro de la casa me bajo de sus brazos pero no me

soltó. Me acaricio la mejilla y yo instintivamente cerré los ojos y nos

quedamos así un rato. Di un respingó cuando me acordé que a lo

mejor Vlad había venido a mi casa.

– Vlad...

Dime cariño.

¿habías venido a por algo en especial o solo para estar

conmigo?

– Había venido a sugerirte si querías vivir conmigo en Valaquia.

Me quede sin palabras y casi sin voz. ¿De verdad que había