Capitulo 1

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<<¿Por que tienes ese golpe?>>

Me dirijo rápidamente a mi casa, con los ojos hinchados y con las lagrimas cayendo  por mi rostro.

Otra vez, ha pasado otra vez, Dereck ha vuelto ha hacer lo mismo de siempre. Ahora mismo tengo una gran marca roja en mi mejilla y seguramente marcas por mi estomago debido a las patadas que el me ha dado. Mi labio me sangra, mi mejilla me arde, me duele todo el cuerpo y los ojos me escuecen.  ¿Cuándo se acabará esta tortura? El siempre me dice que ha cambiado, pero nunca lo hace y lo peor es que no puedo hacer nada. Siempre que intento cortar con el o plantarle cara el me dobla la fuerza y acaba dándome una gran paliza.

Ya me encuentro en la puerta de mi casa ¿Cómo voy a entrar así? No puedo permitir que mis padres me vean con esta cara, no puedo hacerles saber de esto.

Miro a la ventana de mi habitación y está cerrada, genial. Decido abrir la puerta rápidamente taparme la cara con mi pelo y correr rápidamente hacia la habitación.

Oigo como mi madre me llama pero la ignoro completamente. Cierro la puerta de mi habitación con pestillo y me dirijo al baño y no puedo evitar derrumbarme a llorar al ver mi cara reflejada en el cristal. Una gran marca en mi mejilla, el labio inferior con sangre, los ojos rojos e hinchados y una pequeña marca morada debajo de mi ojo derecho

¿Cómo ha podido suceder todo esto? Se suponía que el me quería ¿por qué me hace esto?

Unos golpes suenan en la puerta

-Sam, la cena esta lista. – Me dice mi madre con su dulce voz.

-No tengo hambre mamá. -  La digo intentando sonar lo más normal posible.

-Hija, llevas mucho tiempo sin cenar, apenas comes nada. –Me vuelve a decir y esta vez su voz suena preocupada y me rompe por dentro.

-Mamá, de verdad, no tengo hambre, además siempre como en la escuela, por favor, tengo sueño y mañana tengo que madrugar, deja de molestar con la cena. – La digo con las lagrimas en los ojos y al parecer ella hace caso y se va.

A parte de agredirme físicamente, también lo hace psicológicamente. Gracias a el mi autoestima cayó por completo, todas sus palabras me hacen odiarme cada vez más.

No aguanto más y mis lagrimas vuelven y empiezo a llorar cada vez mas cada vez mas hasta que al final me quedo dormida.

El sonido del despertador retumba en mis oídos y me levanto perezosamente y me dirijo al baño. Mi cara esta un poco mejor que la noche anterior, pero aun así los golpes se me siguen notando demasiado.

Me dejo el pelo suelto para así poder taparme mi cara y pongo maquillaje debajo de mi ojo para ocultar el golpe que hay. Mi mejilla ya no sigue colorada pero tengo un gran golpe en la frente cosa que puedo taparla con el pelo, menos mal. Se nota mi el golpe en mi dolorido labio, me pongo un poco de pintalabios para disimularlo y ya está.

Odio el maquillaje, pero,  no puedo salir a la calle con la cara llena de golpes.

Me visto normal con unos vaqueros y camiseta de manga corta y bajo al salón.

-Buenos días mamá. – La doy un beso en la mejilla y ella me devuelve la sonrisa.

-Hola hija. ¿Quieres desayunar? – Me dice ella con la sonrisa aun en su rostro.

-Eh… no mamá tranquila, hoy desayunare en el instituto, no te preocupes. – La dedico una sonrisa para tranquilizarla y ella asiente no muy convencida.

Pasan los minutos y las dos seguimos calladas hasta que mi padre aparece por las escaleras.

-Buenos días. –Dice el serio, bueno como siempre. Pocas veces le he visto sonreír. –Sam he pensado que un día de estos podrías invitar a Dereck a cenar, hace mucho que no le vemos por aquí.

Bajo la cabeza y muerdo fuertemente mi labio mientras aguanto las lagrimas. Lo peor de todo es que mis padres aman a Dereck, ellos se creen que es un chico genial, fantástico y que me trata como una reina pero en realidad es todo lo contrario.

-Eh si, yo se lo diré. Tengo que irme a clase, hasta luego.  – Digo mientras salgo rápidamente por la puerta.

Tardo en llegar unos diez minutos y cuando llego aun quedan veinte minutos para que las clases empiecen así que me siento en un banco a esperar.

Por suerte Dereck aun no ha llegado y espero no encontrármelo en todo el día aunque es imposible y seguro que está enfadado conmigo por irme ayer corriendo.

Veo a un grupo de chicos y los distingo perfectamente, son Niall y su grupo de amigos los típicos 'chicos malos´ que son 'mala influencia´ y 'no es bueno juntarse con ellos ya que puedes terminar como ellos´. 

A mi no me parecen malos chicos, pero, a la gente le gusta demasiado hablar y no saben que las apariencias engañan.  El ejemplo está en que todo el mundo cree que Dereck es un gran chico y los dos somos la pareja perfecta, los que más se quieren y… bueno, no es así.

Suena la alarma y todos nos dirigimos a las clases, sigo sin verle y me alegro de ello, a saber con el humor que viene hoy.

Voy mirando al suelo y me choco con algo, o, mejor dicho, con alguien, cuando levanto la vista veo a Niall mirándome con no muy buena cara.

-Mira por donde vas. – Me dice bordemente, típico en Niall.

-Bueno, vale lo siento ¿de acuerdo? – Le digo bordemente al igual que el y veo como levanta una ceja y me mira con curiosidad. -¿Qué miras?

-Tienes un golpe en tu frente. ¿Qué te ha pasado? – Dice mirándome fijamente.

Me tapo rápidamente con el pelo y me levanto.

-Nada que te importe, adiós. – Y salgo corriendo lo mas rápido que puedo, dejado a  Niall atrás aun mirándome con esos ojos azules.

I'll be here for you. |Niall Horan|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora