CÓMO LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL CAMBIARÁ NUESTRA PERCEPCIÓN DE DERECHOS HUMANOS.

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Ensayo: Cómo la inteligencia artificial cambiará nuestra percepción de derechos humanos.

Hace 100 años era imposible pensar que una máquina podría realizar las mismas tareas que un ser humano, ahora esta idea ha cambiado. No solo creemos que es posible, sino que estamos seguros de que en algunas décadas las máquinas podrán realizar la mayoría de nuestras tareas de una forma mucho más eficiente que lo que las hacemos nosotros los humanos.

Hoy en día la inteligencia artificial es esencial en muchas áreas de la sociedad como la construcción, la manufactura, la computación, el análisis de datos, la astronomía, la medicina, etc. lo que hace impensable nuestra vida cotidiana sin su ayuda. Este avance tan acelerado de los últimos años nos hace pensar en toda la gran revolución que esta por venir y si en realidad estamos preparados para afrontarla desde varios puntos de vista tales como el social, el ético y el moral (Europea, 2018).

Por una parte, tenemos este crecimiento de la robótica y la inteligencia artificial en el desarrollo de trabajos que hace pocos años solo lo realizaban los humanos. Según un estudio realizado en el 2016 por la Universidad de Oxford en Estados Unidos, en aproximadamente 20 años el 47% de los trabajos actualmente realizados por humanos serán reemplazados por máquinas (BBC News, 2017). Esto corresponde a casi la mitad de la fuerza laboral del país. Trabajos como cajeros, carteros, vendedores, costureros, en general la mayoría de los trabajos de los sectores de transporte o manufactura están gravemente amenazados por ser automatizados.

Es por esto que debemos pensar en cómo esta revolución afectara los derechos de todas las personas, generando grandes cifras de desempleo y posiblemente desestabilizando la economía mundial, o al menos de aquellos países que no logren adaptarse rápidamente a esta tendencia. Aunque los expertos sostienen que se crearan muchos empleos donde prevalezca la inteligencia creativa y social, esta taza de crecimiento probablemente no sea suficiente para abarcar a todas las personas que muy probablemente pierdan su empleo.

Debemos ahora definir el limite que tienen las inteligencias artificiales y si sus acciones pueden obstruir los derechos de los hombres. Aunque mundialmente a las máquinas no se le otorgan derechos morales ni éticos, llegado el caso (y está ocurriendo actualmente) en el que un robot reemplace a un ser humano en su oficio, podríamos pensar que esta máquina está quitándole el derecho al trabajo de la persona.

Esta es una realidad en la que la mayoría de los expertos están de acuerdo, las máquinas poco a poco irán adoptando más características humanas e irán desplazando a muchos de nosotros de sus trabajos y labores diarias. Sin embargo, ¿llegara el momento donde a las máquinas se les otorgue un estatus moral y dónde obtenga derechos y deberes como los seres humanos? Actualmente para considerar un ser como merecedor de un estatus moral se postulan dos criterios (Pascual, 2016). Uno es la sensibilidad, donde el ser es capaz de reaccionar a fenómenos externos, sentir emociones y reaccionar a estímulos físicos o emocionales. El otro criterio es la sapiencia, donde el ser es capaz de entender que es un ser consciente y que sus actos tienen consecuencias.

La inteligencia artificial poco a poco está adoptando estos rasgos y como sucede con los animales, va a llegar el momento donde se abra el debate sobre los derechos que tendrán y si su conciencia puede compararse con la de un ser humano. Si se llegasen a otorgar estos derechos a las inteligencias artificiales la mayoría de seres humanos serian obsoletos. Llegado este punto los humanos no tendrían como poder competir con las máquinas, ya que además de tener los mismos derechos que nosotros, podrían hacer mil veces mejor cualquier actividad (Chakraborty, 2018).

Y el debate es mucho mas complicado cuando miramos el tema de los ciborgs o humanos mejorados artificialmente con partes mecánicas y electrónicas. En un futuro podrían existir personas con habilidades como fuerza sobrehumana, velocidad, memoria muy elevada, capaces de hacer cálculos matemáticos imposibles por las personas común y corrientes, entre otras habilidades (Mestres, 2012). ¿Es justo para las personas competir contra un ser el cual ha evolucionado mediante implantes robóticos y que puede sin ningún esfuerzo realizar muchos mejor cualquier actividad?

Es difícil precisar si un ser con estas características se podría definir como ser humano o como una inteligencia artificial ya que tendría las ventajas de cada una de estas "especies". Podría pensar analíticamente como una máquina y realizar trabajos de forma automatizada, pero también poseería inteligencia emocional y creativa para realizar trabajos como ingeniería, psicología o arte.

Es por esto que muchos expertos en esta área afirman que esa sería la solución si queremos los seres humanos como especie estar a la vanguardia en nuestro mundo. Si queremos en un futuro competir contra los robots, debemos adoptar cualidades de estos, y así nuestra especie trascenderá y evolucionará. Esto sin embargo trae muchos debates éticos sobre nuestra calidad de seres humanos, sobre la perdida de nuestra humanidad y en especial, en como seria esta transición, ya que solo los mas ricos y poderosos tendrían la capacidad de adoptar estas mejoras dejando a la demás población rezagada a tener solo habilidades humanas

Estamos atravesando un momento histórico, una revolución sin precedentes, y debemos tomar medidas claras sobre esto antes de que sea tarde. La inteligencia artificial llego para quedarse. Ha traído grandes avances y mejora para nuestro bienestar como sociedad, pero también ha traído problemas, reestructuraciones de nuestras labores, de nuestros derechos. Debemos actuar ahora antes que el avance nos deje atrás. Los países en vías de desarrollo deben ser conscientes de que en poco tiempo las máquinas reemplazarán a los humanos en muchas labores y que los costos de producción se reducirán significativamente, por lo que si no estamos preparados no podremos competir en un mercado globalizado. Además, como sociedad debemos entender que por más avances que traiga la inteligencia artificial, no podemos dejar que este pase por encima de los derechos de las personas, por esa razón, se deben establecer limites y normas claras para su desarrollo antes de que sea demasiado tarde.

Referencias

BBC News. (12 de febrero de 2017). ¿Está tu profesión en peligro de extinción? BBC Mundo. Obtenido de https://www.bbc.com/mundo/noticias-38930099

Chakraborty, S. (2018). Inteligencia artificial y derechos humanos: ¿son convergentes o paralelos entre sí? Pune, India: Symbiosis Law School.

Europea, C. (2018). Inteligencia artificial, robótica y sistemas "autónomos". Luxemburgo, Luxemburgo: Op.

Mestres, F. (2012). Reflexiones sobre los cyborgs y los robots: evolución humana y aumentación. Ludus Vitalis, 252-252.

Pascual, D. Á. (2016). Inteligencia artificial: un panorama de algunos de sus desafíos éticos y jurídicos. Girona, España: Universitat de Girona.

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