Capitulo 1

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SETH miro el reloj que colgaba en la pared justo encima de la caja registradora de la cual pasaba la mayoría del día. Eran las seis de la tarde y el ya había realizado el cierre de la venta diaria de su negocio. Termino de llenar el libro de ventas y luego lo cerro, hoy había sido un muy buen día para la florería del cual era dueño. Llevaba mas de tres años desde que la había abierto y para ser franco, jamás se había sentido tan bien con el mismo como el hecho de armar desde cero un ramo con flores que el mismo plantaba en el gran complejo que tenia atrás y entregarla a algún hombre enamorado y algún hijo emocionado lo hacia sentir.

Era como poner algo de el en dichas flores y el sentimiento positivo del cliente era la recompensa contando el hecho de que el era algo gruñón, o eso decía su hermana Neftis cada vez que mirada a algún cliente. No es que el en realidad fuera un amargado mal humorado, solo no sabia como expresar bien sus sentimientos y creía hacerlo a través de el cuidado y la creación de los arreglos florales que vendía.

Escucho la puerta detrás de el abrirse y se giro para ver a su hermana quien salía ya sin su uniforme de trabajo y le sonreía con el amor mas puro que solo su hermana podría tener, definitivamente Neftis Ghanem era la persona mas bondadosa que Seth conociera, y el hecho de que fuera una belleza con un cuerpo despampanante, rubia y con una cara de la mas delicada de las muñecas solo hacia a Seth protector con ella, nadie se merecía al ángel que era su hermana.

–Ya todo queda listo para mañana.– sonrió la rubia mientras se acercaba a Seth para acariciar su cabeza.

–Gracias.– Seth aparto la mano de su hermana puesto que no le agradaba que aun quisiera tratarlo como a un niño. –Deje todo en orden así que no tendrás problemas con la venta el día de mañana y no olvides el enviarme un mensaje una vez hallas cerrado la tienda y llegues a casa.

–Descuida Seth, puedes irte con ese Sugar Daddy que te conseguiste tranquilamente.– Neftis rio ante el puchero de su hermano. –La tienda no se ira a la quiebra solo porque te tomes dos o tres días.

Y ahí estaba, la prueba de que su hermana seguía siendo humana y por lo tanto a veces se burlaba de el aunque esta vez no podía replicar, si estaba saliendo con un hombre mayor que se creía su Sugar Daddy.

–Ya cállate.– dijo Seth dándole un pequeño empujón a su hermana mientras tomaba su bolso y se colocaba su abrigo. –Solo tiene cuarenta y ocho.

–Y tu veintisiete. – Neftis alzó una de sus rubias cejas.

–¡Bruja, me dijiste que no te molestaba la diferencia de edad!– Seth la miro con un sonrojo en el rostro. Su voz saliendo algo aguda.

–Bueno no es importante cuando te lleva cinco o diez años, veintiuno, eso es mucho, podría ser tu padre.

Neftis se mordió el labio al decir esto y hasta cierto punto era verdad, que ellos tuvieran el mismo apellido y se quisieran como hermanos no significaba que lo fueran, al menos no de sangre. Toda la familia Ghanem se distinguía por tener el cabello rubio casi platinado además de ser una larga cadena de Alfas y uno que otro beta pero eran algunos primos lejanos, sus padres si habían sido alfas al igual que su hermana mientras tanto Seth, bueno, su cabello era de un rojo tan intenso que podría confundirse con el color de la sangre además de ser un Omega recesivo, eso significaba que era un omega incompleto, alguien que no podía percibir las feromonas de otros Alfas o incluso llegar a experimentar el celo y eso a cierta edad le causo curiosidad, el porque era tan diferente a sus padres y hermana.

El Karma tiene Cabellos Rojos (Ennead)Where stories live. Discover now