M i n e 🌈 Stenny

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El día apenas empezaba para Kenny, y ya tenía que soportar otra estúpida pelea de sus padres, afortunadamente Karen se encontraba en la casa de una de sus amigas y no tendría que escuchar (nuevamente) los gritos de sus progenitores. Pero aquel ya era un escenario normal en la vida de Kenny, no era cosa de todos los días que sus padres se pelearan, pero si lo hacían constantemente, lo suficiente para acostumbrar a sus tres hijos.

En fin, el timbre de la casa McCormick había sonado, extrañando un poco al rubio, no solía recibir visitas luego de que Cartman le contara a todos la situación actual de su familia y casa, sin embargo se dirigió directamente a abrir la puerta, solo para encontrarse a su chico de ensueño, Stanley Marsh, oh claro, junto a Kyle y Cartman.

- ¿Qué hay Kenny? - preguntó con una sonrisa en su rostro, el mencionado juraba internamente que su corazón estaba latiendo bastante rápido en estos momentos - No llegaste a esperar el autobús, así que nos preocupamos y decidimos venir a buscarte

Entonces Kenny cayó en cuenta la hora que era, pero que importaba, lo importante estaba justo frente a sus ojos, junto a sus otros dos amigos.

- No es cierto, Stan nos obligó a venir aquí - dijo Cartman con desgano. Seguidamente Marsh lo golpeó mientras decía "cállate culo gordo".

Kenny sintió como su corazón latía demasiado fuerte, tan fuerte que sentía que se le salía del pecho, literalmente eso pasó y Kenny murió nuevamente esa semana, apenas siendo lunes.

Despertó en su cama como siempre, pero esta vez con una sonrisa en el rostro, causada por Stan, como siempre. Pero ya no había tiempo que perder, las clases ya habían comenzado y él seguía en su cama, tenía que apurarse si quería volverlo a ver.

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Se había demorado más que de costumbre el llegar a la escuela por haber ido caminando, pero Kenny estaba bastante feliz, tanto que ni siquiera se dió cuenta cuando llegó. Tuvo la suerte de encontrarlos en horario de recreo, quizá así pueda pasar desapercibido a la clase, y sin más rodeos, entró. No tardó mucho en encontrar a su grupo, y sin dudarlo, se dirigió a su posición.

- ¡Oh, Kenny! - exclamó Stan, con una sonrisa, nuevamente - ¿Donde estabas?

- En casa - respondió con la bufanda tapando su boca, quizá debería considerar el dejar de usar su ropa de kinder.

El conversar con Stan lo hacía perderse de todo lo demas, cuando lo miraba se perdía en sus ojos y pareciera que ellos dos estaba solos en aquel mundo, lo digo por en este momento está pasando, si no fuera por Marsh, no se habría dado cuenta de que Cartman y Kyle estaban discutiendo, al igual que el caso contrario.

- ¿Pueden dejar de pelearse un segundo? - preguntó el azabache, tomando a Kyle por el brazo y alejándolo del gordo.

- ¡Pero me dijo gordo!

- ¡Y tú me dijiste judío estúpido!

Era básicamente lo mismo de todos los días, los mismos insultos y peleas, y Stan queriendo ayudar.

Kenny se marchó del lugar para ir al salón, a dejar sus cosas para que nadie se de cuenta de que no estuvo. Y para poder despejarse un poco.

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Wow, hace mucho no actualizo esto.