Thunderstorm [YM] (OS)

Thunderstorm

La lluvia azotaba con fuerza contra cada ventana de aquél departamento, la temporada de lluvia se había adelantado un par de días tomando a gran parte de la población por sorpresa.
Pero a aquellas altas horas de la noche, el único sosprendido de la tormenta (y más por los truenos que ésta traía) era un pequeño y adorable rubio, cubierto hasta la cabeza con su cobija mientras temblaba con cada estruendo.

Jimin odiaba las tormentas.

No por el agua, como ya recalcamos, si la lluvia lo atrapaba de camino a casa no le molestaba en lo más mínino mojarse; lo que odiaba eran los truenos, ese maldito estruendo casi impredecible que hacía saltar hasta el último cabello de su persona.

No entendía por qué debían existir. ¿Cuál era su sentido?

ㅡ¡AH! -el rubio gritó junto al estruendo del trueno, encogiéndose más, debajo de aquella sábana.

Las lágrimas comenzaban a desbordarse irremediablemente de sus adorables ojitos, ojitos que tenían loco a uno de sus compañeros de clase: Min Yoongi.

Yoongi siempre había sentido cierta intriga por el de ojitos sonrientes, sin embargo nunca le había prestado atención hasta aquella noche en que se había quedado tarde en el instituto dentro de la sala de música mientras una lluvia casi igual de feroz azotaba la ciudad.

***

Yoongi había pasado todo lo que había podido de su tiempo libre luego de clases encerrado en la sala de música, disfrutando de su hobby al tocar el piano.

No fue hasta que la luz de un relámpago atravesó la medianamente oscura habitación que Min se percató de la hora y la tormenta que había, levantándose del piano y tomando sus cosas para emprender camino a su hogar. Camino hacia la salida recordó haber olvidado algo en su salón, por lo que dio media vuelta con intención de recuperarlo.

Caminando por los pasillos miraba los salones, en su mayoría vacíos y cerrados, hasta percatarse que uno de los salones de años menores se hallaba abierto y dentro de él, un pequeño ovillo rubio tembloroso debajo de uno de los pupitres.

Extrañado se acercó a la puerta y con sus nudillos golpeó esta para llamar la atención de aquél estudiante quien no sabía qué hacía ahí a esas horas (tampoco él debería estarlo pero, al menos él sabía a qué se había quedado y tenía una excusa; sin embargo no la tenía para el menor). No fue escuchado gracias al repiquetear de la lluvia en las ventanas y sorprendido se adentró al aula tras ver como el pequeño de rubios cabellos gritaba y se estremecía tras un trueno que había resonado.

ㅡHey, ¿estás bien? -preguntó el peliazul.

Jimin se removió sorprendido al ver al mayor agachado frente a él. Limpió sus ojitos rápidamente con el dorso de su mano y desvió su mirada. No sabía que estaba haciendo su hyung ahí pero tampoco quería que nadie lo viese; sin embargo la tormenta había iniciado tan repentinamente que ya no pudo irse.

ㅡEstá bien... Tranquilo... -trató de tranquilizar Yoongi al menor.

Min no sabía bien qué estaba pasado, pero no era quien para juzgar al rubio. Sabía perfectamente lo que era hallarse hecho un ovillo en el suelo sin saber qué hacer, muriéndose de miedo.

Le extendió su mano al de llorosos ojos para invitarlo a salir de debajo de aquél escritorio, el menor, tembloroso, sólo lo observó con duda; misma que dejó de lado ante el resonar del trueno que lo espantó hasta los huesos, haciendo que literalmente brincara de debajo de aquél mueble hacia los brazos del mayor; escondiendo el rostro en su pecho.