❝...ʙᴀᴅ ɢɪʀʟ [...ᴄʜᴀᴇʟɪsᴀ...]

Epílogo.

Lalisa Manoban ahora de ya unos 27 años de edad llegaba cansada de su trabajo, hace ya menos de tres años apenas termino sus estudios entro a trabajar como psicóloga en una institución dónde le pagaban muy bien, y con eso ahorro y ahorro, para comprar una casa y por supuesto la gran boda con Rosanne la mujer aquien más amaba.

-¡Mamá Lisa!- Una pequeña niña de cabello rubio de ya unos 4 años corría hacia la chica quien estaba cansada y con la poca fuerza que tenía la levantó en sus brazos.

-Chaewon ¿como estás bonita?- Pregunto con una sonrisa.

-Lisa, ya llegaste.- Sonrió desde la puerta de la cosina una hermosa mujer de cabello naranja de la misma edad que la rubia, era Rosé.

Ambas ya llevaban tres años de casadas, habían adoptado a una pequeña niña que tenía solo un año de edad y eran felices con su pequeña familia. Por fin estaban juntas ya no necesitaban nada más para ser felices.

-Hola amor.- Con una sonrisa y su hija en brazos la rubia procedió a acercarse a su esposa y le dió un rápido beso en los labios a Rosé quien sonrió.

-Ven vamos a la cosina, te prepare tu comida favorita.- Le sonrió mientras la rubia la seguía.

-Ay ya tengo mucha hambre.- Lisa bajo a su hija dejándola nuevamente en el suelo y está procedió a correr rápido hacia la cosina entre risas.- Y quiero postre~.- Dijo estás últimas palabras en tono coqueto mientras besaba a Rosé en los hombros y tocaba su cintura.

-Lisa... Nuestra hija puede vernos.- Sonrió la contraria y apartó a la rubia.

-Pretextos... Esta noche no te salvas señorita Park...- Le sonrió a lo que Rosé solo largo risas nerviosas mientras veía como la pequeña niña esperaba ansiosa la comida.

-Ve a sentarte Manoban es hora de cenar.- Ordenó a lo que Lisa solo procedió a hacerle caso.

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-Algo que no cambiará nunca es la forma en la que me haces sentir amada.- Sonrió Rosé exhausta acostada al lado de la rubia totalmente desnuda, habian tenido relaciones silenciosamente para que la pequeña no las escuchará.

-Mi amor por ti es muy grande, siempre serás amada en mis brazos...- La abrazo acercándola a su cuerpo.

-No puedo creer que un día comenzaste siendo una total idiota conmigo.- Reía.- y ahora eres tan dulce conmigo... Estamos casadas, tenemos una niña y somos felices...

-¿Fue muy inesperado verdad? Bueno... Todo llega sin pensarlo... Solo se que ahora te amo.- Largo una risa Lisa y se aferraba a ella.

Sin duda su amor perduraria toda su vida, era lo más lindo.

Fin.

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Ahora sí terminamos está aventura uwu, gracias por apoyarla... Sigan leyendo mis otros proyectos, los amo uwu.