ZOM-V

capítulo 1

12:30 PM

Caroline caminó nerviosa alrededor de la sala de control, Ryan tomó su muñeca y la apretó levemente obligandola a detenerse casi al instante. Ella estaba por gritarle groserías pero Ryan fue más rápido y la interrumpió antes de que pudiera siquiera decir la primera letra.

—Hey, Caroline, quédate quieta y escuchame atentamente, no volveré a repetir esto y quiero que te quede claro ¿si? —la castaña se limitó a asentir y lo miró con algo de miedo mezclado con nerviosismo que claramente se reflejaba en sus ojos claros y llorosos.— noquearemos al guardia de esta puerta —señaló la única entrada hacia la sala de control— porque claramente no nos dará lo que necesitamos si se lo pedimos. —Caroline hizo un gesto dandole la razón pero seguía sin entender a qué cosas se refería, Ryan al ver su cara de confusión se mordió el labio algo estresado y se acercó a su oído para que el guardia no pudiera escucharlo—: Le robaremos el arma, y las llaves para entrar en aquella habitacion llena de armas a la que solo los guardias tienen acceso. —La castaña volvió a asentir.— Señora Cross, usted deberá quedarse aquí monitoreandonos, tomaré estos audifonos —le dio un pequeño audifono bluetooth que se conectaba con la sala de control a Caroline y el se quedó con otro— y usted podrá decirnos si tenemos a los conejillos cerca o algo así ¿está bien? —Nancy Collins asintió y besó ambas mejillas de su hija, la acarició y se sentó a observar las computadoras, tenía un mal presentimiento, por esa razón se despidió de aquella manera tan inpropia de ella—.

Caroline y Ryan se miraron a los ojos. Se asintieron en señal de fuerza, y abrieron la puerta, el guardia estaba ahí, asustado, sus ojos tan grises que casi eran transparentes lo hicieron parecer vulnerable, se asustaron, ya que sus ojos se parecían muchísimo a los del chico que se transformó, pero al darse cuenta de que estos si tenían pupila, se tranquilizaron. La castaña se mordió el labio y se acercó a Ryan.

—llevemoslo con nosotros. —susurró la ojiazul por primera vez desde que vieron aquella imagen en la pantalla— se ve que puede ayudarnos. —volvió a susurrar al ver la cara dudosa del pelinegro, finalmente este asintió— Hey. —tocó el hombro del guardia, ya que el estaba algo perdido en alguna parte del pasillo. El dió un pequeño salto pero volvió a reincorporarse rapidamente, la observó y se rascó la nuca con nerviosismo—.

—¿q~qué se le ofrece? —el guardia con ojos grisáceos maldijo por lo bajo al notar como su voz temblaba—

mientras tanto, Caroline se preparaba para decir algo cuando oyó un sonido ensordecedor a través de los audifonos y detrás de la puerta por la que salieron hace unos minutos. Caroline se tapó la boca al notar que lo único que se oía eran gritos de su madre. Intentó acercarse a la puerta, pero Ryan la detuvo.

—Caroline, ya no podemos hacer nada, ahora debemos correr hacia el otro extremo del pasillo para buscar las llaves, ¿entiendes? —el guardia no entendía nada, pero al oír la palabra llaves, una pequeña ampolletita se encendió en su cerebro. Tocó su bolsillo y sonrió al notar que seguían ahí—.

—Disculpen, primero; mi nombre es Blake, mucho gusto, soy su guardia desde hace una semana, y segundo; yo tengo las llaves.— la castaña y el pelinegro lo miraron incrédulos. Caroline decidió reaccionar y tomó la mano de ambos comenzando a caminar rápidamente hacia el extremo donde tenían aquellas armas—.

12:36 PM

Nancy sacudió sus manos al acabar con ambos de esos conejillos como les habían apodado, estaba feliz de haber tomado suficientes bisturís de la sala de operaciones.

observó las pantallas y vio como los chicos se acercaban a un pasillo lleno de esas cosas extrañas que hace un momento eran personas, también vió que iban con el guardia, pero no diría nada contra eso, al menos no aún.