El West, otro año más, repleto de gente. Los nuevos estudiantes algunos con cara de miedo, otros con cara de emoción empiezan a entrar por la puerta principal.
- Eh, buenos días, estabas embobada - Kaylie me pasa la mano por delante de la cara sacándome del trance. Kai es mi amiga, nos conocemos desde siempre y supongo que por eso somos amigas, la quiero, de verás que sí, pero odio su comportamiento y aunque he intentado que se de cuenta todos los intentos han sido en vano. - ¿en que pensabas?
- Buenos días, en nada.. simplemente es nuestro último año aquí, eso me entristece, supongo...
- Por eso tiene que ser EL AÑO, tiene que ser recordado como el año de nuestras vidas Julia, EL AÑO - Kai empieza a hacer aspavientos sin darse cuenta de que Fer se acerca por la espalda así que le da un manotazo
- Ah, eso ha dolido - dice Fer mientras se frota la frente. Kai se pone rojísima y se tapa la cara, Fer le gusta desde que tengo memoria pero nunca se lo ha dicho, finge no estar interesada de cara a la gente, pero conmigo no hay secretos.
- Lo siento Fer, no te he visto. - consigue decir cuando puede articular palabra - ¿nervioso por empezar el AÑO?
- ¿El AÑO?
- Si, nuestro último año en el West - Kai se vuelve a emocionar
- Bueno, es uno más, solo que no habrá otro detrás - Fer hace un gesto de indiferencia y Kai se pone seria - bueno chicas, me voy a entrenar con Spencer, así de bien empieza el AÑO - dicho esto se marcha riendo y nos deja en el parking esperando a Nina.
Sigo observando a la gente pasar, felices, riendo... Algunos nos miran y susurran, puede ser bueno o malo pero la verdad hace tiempo que eso dejó de importarme.
A lo lejos puedo divisar la melena rizada de Nina acercándose, risueña como siempre y siempre de punta en blanco. Cuando ya estamos las tres en el que sería nuestro último año de instituto, como siempre, abrazos por los pasillos, el sonido de las taquillas cerrándose y por último, el timbre.
Nuestra primera clase es anatomía y al entrar reconozco las viejas caras del año pasado, cada cuál inverso en su mundo, pero hay una cara que no reconozco en la tercera fila, en el pupitre que antes solía ocupar Kelz, un chico problemático con unos padres estrictos que lo mandaron a una academia militar en verano sin aviso de vuelta. El chico misterioso era castaño y me llamaban la atención las numerosas pecas que tenía y una pequeña quemadura que sobresalía sobre su camiseta, levantó la vista encontrándose con mi mirada observadora y curiosa y me lanzó una sonrisa irónica y volvió a agachar la cabeza.
Siempre nos sentamos en segunda fila, Kai y Nina se sientan juntas y yo con un chico llamado Eric y aunque me cae genial no tenemos más trato del que mantenemos en clase. Eric se había sentado delante de el chico misterioso, al llegar pude notar una mirada clavada en mi nuca cuando empecé a sacar los libros de la materia.
Eric y yo pasamos toda la hora contándonos lo que hemos hecho en el verano, él se fue a Europa a visitar a unos familiares y allí conoció a Fabriccio, un apuesto italiano que le ha puesto la vida patas arriba. De vez en cuando desviaba la mirada hacía el chico misterioso que parecía estar dibujando algo en su cuaderno y para mí sorpresa, resultaba ser muy inteligente, asombrando a la señora Smith con algunas de sus respuestas.
Suena el timbre y me pongo a hablar con las chicas, a lo lejos veo como el chico misterioso abandona la clase, supongo que tendrá otra asignatura diferente.
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Teen FictionJulia es la chica perfecta, todos quieren ser como ella, todos menos ella. Odia las cosas que se le han impuesto desde pequeña, odia que la traten como una muñeca de cristal. Marc llega nuevo a Franklin, rompiendo con todo, entre otras cosas con la...