Tʜʀᴏᴜɢʜ Tʜᴇ Mɪʀʀᴏʀ

Prologo

Un reino, mágico cómo ninguno otro, el cual era dirigido por sus dos reyes; ambos tan sabios,  amables y poderoso como ninguno otro.

El Rey ,el cual tenia como nombre de Jude Heartfilia, reinaba con justicia y humildad, haciendo que cualquier injusticia fuera castigada, defendía a las personas más vulnerables como niños, mujeres y ancianos.

Mientras que la Reina, de nombre Layla Heartfilia, reinaba con amabilidad y dulzura, era la mujer más amada de todo el reino aparte su belleza era inigualable. Pero no solo era la mas hermosa, si no que también era la mas poderosa si a magia nos referimos. Ambos reyes, amados por su gente y por los demás reinos existentes. Qué más podan conseguir todo lo que quisieran.

Pues no todo podían conseguir, los reyes siempre habían querido tener un heredero para que algun día el o ella liderara su reino mucho mejor de lo que lo hacían ellos. Pero lastimosamente no podían concebirlo por mas que intentaban.

Ambos reyes se estaban dando por vencidos, tal vez el sueño de tener un hijo nunca se haría realidad. Bueno eso pensaban, hasta que un día las enfermeras de la reina dictaron que estaba embarazada.

El reino se regocijo, pronto nacería el heredero de sus amados reyes. Para celebrar el próximo nacimiento, los reyes hicieron un gran baile invitando a personas de la alta sociedad o a plebeyos, aunque para ellos no había diferencia alguna. 

El baile transcurrió con normalidad, gente bebiendo, gente bailando, los reyes siendo felicitados; lo normal no. 

Cuando el baile estaba por finalizar, los reyes hablaron ante sus súbditos e invitados, dando las gracias por tan gran recibimiento el cual recibiría el futuro príncipe o princesa. Para poder cerrar el baile como era debido, el rey y la reina levantaron sus copas junto con los demás invitados y después poder darle un trago a la bebida que se encontraba en las copas. Nadie se esperaría lo que pasaría en ese momento.

Un golpe seco, fue lo que sono en el gran salón, seguido de la vista del cuerpo de la reina tirado en el suelo. Todos los invitados se alarmaron al ver a su reina tirada y ver cómo el rey y demás personas se la llevaban a sus aposentos.

Estaban preocupado, que pasaría con la reina? se encontraba bien? o peor aun..Perdería al bebe?

Las enfermeras hicieron todo lo que pudieron, pero la reina quedo postrada en una cama; aun con el embarazo.

La alegría que rodeaba el gran reino se apago, la gente tenia miedo, tenían miedo de perder a su gran reina; y gracias a eso, grandes chismes se empezaron a propagar por todo el reino. El mas conocido era de que habían envenenado la copa de la reina. Si bien no se sabia quién era el responsable; si es que era verdad sobre lo del envenenamiento; todas las acusaciones iban sobre el mensajero que había mandado el gran reino dragón. 

Ahora todo el reino de Fiore, culpaba al mensajero de haber envenenado la copa de la reina. El rey tubo que proteger al mensajero de que no fuera asesinado. No quería una guerra en medio de que su amada esposa estaba en cama. Aparte, el sabia que el responsable no había sido él, si bien no había pruebas de que el mensajero fuera el culpable o no; el creía ciegamente en que él no había sido. Y a palabras del rey, el mensajero empezó a ser protegido por guardias del reino.

Pasaron los meses y la fecha para el nacimiento del príncipe se acercaba, todos estaban preocupados y emocionados; pero más que emocionados estaban preocupados. No sabían si la reina sobreviviría al parto. Sé esperaban lo peor.

El día del parto llego, por suerte el parto fue exitoso y nacional una hermosa princesa de ojos color chocolate y el cabello rubio, heredado de ambos padres. Todo el reino se regocijo, celebraron 7 días y 7 noches el nacimiento de la pequeña princesa y recuperación de su amada reina.

Nunca se esperaron que esa pequeña bebe, fuera la que los salvaría de la destrucción