Capitulo IV

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Capitulo iv

Al día  se decidió organizarse el Capitán dijo:

-Muy bien hoy trabajaremos duro si queremos sobrevivir

-Juan tu busca una casa

-Julio tu iras a por materiales

-y yo me encargo de la caza

Todos de pusieron de acuerdo y cada uno tomo su rumbo

Juan al cabo de una hora encontró una cueva que no era grande como para albergar animales hostiles entro a explorar y resulto que era perfecta Juan ya cumplió con su misión y se sentó al lado de la entrada de la cueva para que lo vieran sus compañeros

Si te parabas mirando hacia donde mira la entrada habría solo una llanura al frente lugar perfecto para dispararle a un animal

En la llanura se divisaba una persona

Era Julio que traía troncos en las manos Juan corrió a cargarle algunos troncos y los depositaron en la cueva Julio le dijo

-Juan has visto al capitán

-No, no lo he visto descuida ya lo encontraremos

Pero los náufragos no tenían idea de la situación del capitán  cabo de media hora se escucha ¡Ayuda! Y los amigos miran por la entrada de la cueva y ven al capitán corriendo de un oso pardo

Los Náufragos se hacen lanzas con los troncos que trajo Juan y corrieron a ayudarlo   Julio le intentó clavar en el pecho del animal la lanza pero el oso lo tumbo al piso el oso se paró y a un segundo de matarlo Juan tira la lanza con una precisión que le da justo en el ojo dejando al animal caído justo al lado de Julio,  Juan lo levanta y los náufragos de van a la cueva

La isla de nadieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora