Obsession

Medidas desesperadas

*Por lo visto este cuarto no tiene nada de interesante. Me sorprende lo poco perseverante que soy*

-Que hambre

*Escuché como se abrió la puerta y era el, me quedé observándolo y se me había ocurrido algo para tener una oportunidad de escaparme*

-¿Y ahora que quieres?

+Solo vine a ver cómo estabas, aunque probablemente estés aburrido, ¿quieres platicar de algo?

*Me pareció rara su propuesta de plática y de acercase a mi.*

-Bueno, no tengo nada mejor que hacer así que ¿de que quieres hablar?

+Uhmmm, ¿quieres jugar a preguntas?
Mi idea es que no sepas nada de mí y yo de ti si, bueno más de lo que ya se.

-Eres raro pero bueno, tu empieza con las preguntas.

+Bueno.
¿cómo te sientes ahora mismo?

-¿Enserio me preguntas eso?

+¿Ocurre algo?¿Dije algo malo?¿Qué pasa?

-Me tienes aquí encerrado, sin saber nada de ti y me preguntas ¿Cómo me siento?

*Me di cuenta de que era una persona muy manipulable, por cómo se preocupó y también que nunca antes había hecho esto.*

+Tienes razón, que estupida mi pregunta, mejor me voy. Vendré en unas horas para darte tu cena.

*Se estaba llendo y no aguantaría más tiempo aquí encerrado, debía hacer algo.*

-¡ESPERA!

*Me levanté y me acerque a el, lo abracé, le pedí perdón por haberle hablado así.*

•Me sentí completamente tonto, pero a la vez muy cómodo, definitivamente me gusta esto.•

*¿Y ahora qué hago?.*