Toda Una Vida (Tododeku One-shot)

Parte Única

Camino a pasos lentos, mirando, pero sin ver, con un peso invisible impidiéndome que me mueva como siempre lo hago o que siquiera respire con libertad.

Las carpas de seda semi transparente están siendo levantadas, miles de personas caminan de un lado a otro llevando candelabros antiguos, arreglos florales, alfombras y otros detalles que ni siquiera entiendo para que son, porque les han pagado, y mucho, para que este día todo resulte mas que perfecto; el único problema aquí soy yo, yo y mis temores, mis molestias y mi desgano.

¿Cuál es el precio de nacer en una familia de alta cuna? Que ni siquiera tu vida te pertenece.

Mis tres hermanos y yo fuimos criados dentro de una familia tradicional, nos cuidaron bien pero también nos exigieron mucho para que resultáramos ser perfectos. Touya es un alfa sumamente respetado, maneja su propia empresa en estos momentos, aunque eso le obligue a mantenerse lejos de la familia todo el tiempo por los viajes que hace en compañía de su esposa; Natsuo es beta, pero como heredó el talento en el arte de mi madre, le permitieron hacerse de renombre en ese ámbito y también le va muy bien; Fuyumi es una tierna omega y se casó hace tres años con un médico alfa de buena familia, ya tiene un cachorro de año y medio, y se ve muy feliz. Y al final de todo estoy yo: el menor de todos, alfa “orgulloso” y heredero de todas las empresas Todoroki, no es que las pidiera. Mi familia no es perfecta, mis padres no son precisamente amorosos, pero se preocupan por darnos todo lo que necesitamos, solo lo mejor y eso incluye, por desgracia, el que elijan también a nuestras parejas.

La sociedad en la que vivimos dice que todos los alfas tienen omegas destinados, pero la probabilidad de llegar a encontrarlos es tan escasa que los matrimonios concertados no son tan extraños.

Estoy aquí por esa razón…

Esta es mi boda.

En menos de cinco horas voy a estar enlazado para toda la eternidad con algún omega al que jamás he visto, uno que mis padres en persona han seleccionado confiados en su instinto, porque él o ella tiene que darme hijos fuertes y hermosos para que el viejo tenga alfas con quienes contar en los negocios y omegas para formar alianzas con otras familias, o eso es lo que cree.

No se ha dado cuenta de que en cuanto me case seré considerado oficialmente un adulto independiente, que soy un accionista mayoritario de la empresa familiar y que no dejaré nunca que le haga algo a mis cachorros.

Esa es la razón por la que no me quejo, porque es la única forma que tengo de ser libre.

Siento pena por ese pobre omega, no es justo para él terminar así dentro de este intercambio, pero estoy determinado a que, si bien tal vez nunca llegue a amarlo, al menos si voy a cuidarlo bien; además de que pienso que, si está dentro de este circo, es porque su familia no es muy amable que digamos...también debe estar desesperado por un poco de libertad.

De alguna forma he llegado hasta la carpa principal, donde se llevará a cabo la ceremonia y donde nos veremos por primera vez.

Mi madre ha llegado hasta tal extremo para que se respete la tradición que la carpa entera esta dividía en dos por una tela blanca y delicada para no correr el riesgo de ver a nadie, pero por mi mitad ya puedo darme una idea de cómo será la decoración final.

Hay muchas sillas de madera blancas adornadas con más seda y grandes listones dorados, por todas partes veo ramos y más ramos de flores completamente amarillas: narcisos, rosas y algunos tulipanes, y para rematar, del falso techo cuelga un enorme candil dorado decorado con miles de cristales.

Insistieron mucho en esto porque es el color del oro y según me han dicho, es de buena suerte para la pareja, pero esto no es ni de lejos lo que yo hubiera querido.