Kara y Lena se encuentran viviendo la difícil etapa de la maternidad con sus dos hijos mellizos, Kaylee e Ethan que tienen meses de nacidos.
Un evento cambiará su rutina por un día y se verán haciendo lo que jamás pensaron que harían.
One-Shoot ani...
Nota de la autora: Historia corta entre el final de The One You Love Most y la precuela de Kaylee y Astra.
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Laureen
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*Kara Pov.*
Realmente sentía la pesadez de mis ojos y sacudí la cabeza para tratar de reaccionar, no puedo dormirme. Tengo que seguir este artículo para entregar mañana y no puedo depender de terminarlo en la casa porque cuando llego lo que menos hago es trabajar. Desde que nos casamos nuestra rutina de casadas se ha limitado a pasar con los niños, ir a trabajar y dormir.
"Oye, Kara..." Levanté la mirada y sonreí a uno de los chicos de impresiones. "Lo siento, te quería interrumpir."
Le sonreí e regreso y negué con la cabeza.
"Para nada, tranquilo. Solo que estoy bastante atareada con la edición de mañana."
"Por eso venía. ¿Ya la tienes lista?"
Le asentí y le mostré el monitor con un dedo.
"Dame 15 minutos y yo misma iré a llevártelo."
Sonrió y acerqué mis manos para comenzar a escribir. ¡Maldita sea! Tengo que apresurarme. Cuando se fue usé mi velocidad para terminar el maldito artículo. No me tomó demasiado, lo terminé en diez minutos. Solo que sentía el cansancio mental, por mucho que mi cuerpo tuviera la fuerza para demoler un tanque. Me puse de pie y salí de ahí con el USB para entregar en imprenta, todo ya diseñado y editado. Esto de ser editora en jefe es un tanto agotador.
Salía de la oficina para regresar a la mía cuando mi celular sonó. Tomé el celular y suspiré al ver que era Lena. Lo sé, estaba llegando tarde a casa.
"Lo siento, ya salgo. Ya voy."
"Oh, Kara. No te preocupes amor, no te llamo por eso, al contrario. Relájate y ven tranquila."
Me detuve en seco en medio de la oficina y eso me extrañó. El tono de voz en Lena era casi alegre.
"¿Por qué? ¿Ahora qué sucede?"
"¡No sucede nada, amor! Simplemente tengo una sorpresa para ti, pero esperaré a que llegues a casa para decirte."
"Oh... está bien. Ya salgo para ahí. ¿Quieres que lleve algo de cenar?"
Comencé a juntar las cosas y noté que la mayoría de los reporteros se iban mientras que escuchaba risas del otro lado.
"No, no te preocupes. Tan solo apresúrate."
Qué extraño. Todo era muy extraño. Suspiré y terminé de tomar mis cosas. Saludé a los demás y fui al ascensor. Suspiré y me preparé para seguramente una visita de Alex y Sam con Ruby y Astra. Lo más seguro es que ellas vinieron de visita. De camino a casa tuve que lidiar con un ladrón por lo que no tuve opción que llegar a casa con el traje puesto y toda mi ropa en la mano. Cuando entré y cerré la puerta sentí risas pero estaba tan cansada que no quería ni escuchar con mi oído.
