El enorme vehículo rojo circulaba por las abarrotadas carreteras a una velocidad pasmosa, si se hubiera tratado de cualquier otro trasporte habría tardado el doble o tal vez el triple en llegar a su destino, pero el molesto sonido proveniente de las sirenas que plagaban la superficie carmesí alertaba a todos los conductores de que algo importante estaba pasando.
- control aquí convoy Craft 3 , acercándonos a la zona designada-
La excitación era palpable en los dos tripulantes del vehículo, incluso el conductor, con años de experiencia a su espalda, apretaba el volante con fuerza, como si esperara que de alguna forma esto incrementaría la velocidad a la que se movía el vehículo.
A pesar de la suma concentración que mantenía en la carretera, le resultó imposible no darse cuenta del estado en el que se encontraba su copiloto, estaba al borde del colapso.- ¿Es tú primera interfase?- pregunto sin levantar la mirada de la carretera
-¿querrás decir posible alerta de interfase no? Quiero decir no es seguro que nos autoricen a utilizarlio-dijo con voz entrecortada
Parecia que le costaba un mundo articular cada una de las palabras, lo que no hizo otra cosa más que aumentar la tensión de su receptor. Uno de los peores problemas que podían surgir en una operación de semejantes tipo era no poder contar con el apollo de tu compañero, y el suyo parecía estar al borde de un ataque de ansiedad.
Quiso decirle cualquier cosa que le calmara aunque fuese lo más mínimo, quiso hablarle sobre el importante labor que tenían entre manos, sobre la responsabilidad que recaía en ellos y la fuerza de voluntad que debían tener para afrontar cada una de las operaciones. Pero no quedaba tiempo, ya estaban demasiado cerca de su objetivo como para ningún discurso épico o motivacional.
-Estoy contigo chaval, estamos juntos en esto, tú pegate a mí y te prometo que no pasará nada, conseguiremos protegerlos a todos- es lo único que se le ocurrió para aplacar la discordia que atenazaba al joven, aunque para su desgracia parecía que no había surgido ningún efecto.La enorme columna de humo encontraba su origen en un panorama de lo más escalofriante, un enorme camión empotrado contra uno de los robustos quitamiedos que se alzaban a ambos costados de la carretera, varios coches volcados y lo que parecía ser el cuerpo de una persona tirada sobre el asfalto
- control contacto visual , solicito procedimiento. Cambio -
- T-5 minutos - la voz apática y fría del operador recordaba a una máquina más que a una persona de carne y hueso - uso del suero autorizado, repito uso del suero autorizado. Extremen precauciones.
Cambio y cortoDe cerca la escena era incluso más perturbadora, una gran congregación de personas se hallaba observando la escena con una mezcla de terror y curiosidad en su rostro. No obstante no era eso lo que creaba esa atmósfera tan siniestra, más bien era el echo de que la marabunta se encontraba a unos treinta metros del lugar, lejos de la zona a la que se dirigía el armatoste rojo .Cualquiera se hubiera dado cuenta de que guardaban precauciones, como si esperasen que algo horripilante estuviera a punto de suceder y el morbo fuera lo único que los retuviera allí.
El vehículo freno en seco, se encontraban a unos pocos metros de la catástrofe. Rápidamente el conductor introdujo una especie de código en un aparato electrónico que se ubicaba al lado del volante. Tras unos segundos de carga un cegador brillo verde iluminó la escena, tan veloz como antes configuro el dispositivo de forma que en la pantalla aparecieron cinco puntos verdes. Una serie de números indicaban su posición, uno coincidía con el camión, otros tres correspondían al coche volcado que se encontraba más lejos y el último a un pequeño vehículo de tres ruedas que se hallaba extremadamente cerca de sus auxiliadores, solo uno de ellos parpadeaba. Sin perder ni un segundo el más experimentado tocó la pantalla en el mismo lugar donde se encontraba ese débil latido verde e inmediatamente después salto una alerta que cubrió toda la pantalla.
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Entropia
Aktuelle LiteraturUna serie de relatos cortos, mayoritariamente de ciencia ficción, sin ningún tipo de correlación entre ellos más que la de haber surgido de lo más profundo de mi imaginación