- ¿Me veo bien? - preguntó Lana al bajar las escaleras.Que estúpida pregunta. A veces pienso que usa un mecanismo de tortura en sus preguntas para seguir jugando con mis ya rechazados sentimientos hacia ella. ¿Cómo decirle que no? Cuando ella sabe muy bien que ante mis ojos nunca ha existido un cabello que se encuentre fuera de lugar. Sospecho que se aprovecha de mi palpitar cada vez que sonríe para que su autoestima siempre se encuentre alto.
Pero esta vez había algo diferente en ella; su atuendo la hacía ver más reveladora de lo que estoy acostumbrado a verla... siempre he tenido esta inocente imagen de que es una chica buena y totalmente respetable.
¿Pero a quien quiero engañar? Es Halloween. Por supuesto que dejará mostrar sus piernas con ese vestido corto y apretado. Por supuesto que intencionalmente acentuará de una manera asesina sus hermosos pechos con el escote que me está mostrando tan descaradamente. No me queda más que tragar saliva y buscar las palabras adecuadas para intentar que cambie de vestuario.
Muy dentro de mi no quería esperar ni un minuto mas a que el proceso de vestirse comenzara de nuevo; ya íbamos algo tarde, pero no quería lidiar con las seguras miradas de deseo que irían directamente ancladas a sus curvas tan acentuadas.- Te queda bien, pero dime ¿Quién se supone que eres? - dije de una manera burlesca mientras mis dedos empuñados bajo la mesa del comedor se aprietan en un fallido intento de dejar salir la impotencia dentro de mí. - Pensé que habíamos acordado ser Bonnie y Clyde.
Ella me miro un poco desilusionada, suponiendo en sus adentros que de alguna forma había herido mis sentimientos al defraudar nuestro acuerdo de disfraces. Se quedó callada por un momento y sonrió.
- Vamos, no es para tanto. Después de todo creí que no disfrutabas el hecho de disfrazarte e ir a fiestas de Halloween. - es verdad, me parece totalmente innecesario y patético. Pero realmente me esmeré para verme bien a su lado e intentar hacerle justicia a lo bella que siempre se ve.
A pesar que sí me encontraba un poco molesto (no tanto porque nuestros trajes no coordinaran, sino por la escasez de tela en su vestuario) me ganó su encanto y no pude hacer más que devolverle la sonrisa. No era justo, pero qué va.
- Está bien, tu ganas. Supongo que ahora mi disfraz realmente no tiene sentido, no soy más que un Clyde soltero en una dimensión alterna donde Bonnie en Halloween se disfraza de... - paré y la miré de arriba a abajo tratando de descifrar lo que aquel vestuario tan escaso de creatividad era - ¿qué se supone de que eres de nuevo?
- Soy un gato - mi rostro no tardó en relajarse y no pude evitar soltar una carcajada a lo que ella reaccionó arrojándome un cojín de su sala - me faltan mis orejas y pintar mis bigotes ¡tonto! - le ganó más su sentido del humor y sonrió - Además, ahora este Clyde soltero que dices que eres, no terminará muerto como el original. Te salvé la vida al no vestirme de Bonnie
- ¡Ja! Por lo menos eres una gata cómica. - contesté mientras en mis adentros recurría en mi pensar que, de una forma irónica y metafórica, ella decide una vez mas no estar a mi lado... ni en la vida real, ni como Bonnie en esta estúpida fiesta de Halloween.
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Clyde sin Bonnie
Teen FictionSi te sientes de animos a mantener la vibra otoñal, romántica, y triste de Halloween no pierdes nada descubriendo de que trata esta breve historia de una página. 🍁🍂💛🎃 - tiempo de lectura: 2 min aprox.