El grito de antes de una tragedia es aquel que no oyes, que no eres consciente de haber emitido. Solo entre la nebulosa de las luces, las voces, el corro de la gente, sientes una áspera sensación en la garganta. De desgarro, sequedad. Como si en esa milésima de segundo hubiesen arrancado de tu interior algo de golpe, de tal forma que no sepas que no está hasta que lo necesites.
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Quietly screaming
PoetryEs lo que siento escrito de la forma más mundana y poco talentosa.