— ¿Alguna duda?
Ash escaneó con su mirada a sus estudiantes. El ambiente se sentía turbio y los alumnos estaban cabizbaja, sin querer entrar en contacto visual con él. El alfa fue recompensado por un incómodo silencio.
Lo más irónico del asunto es que Ash sabía perfectamente las razones de ese ambiente tan pesado, y no era por la exhaustiva materia que enseñaba.
Hoy era catorce de febrero, él y Eiji no lo podrían celebrar, y eso lo molestaba.
Ya estaba calendarizado meses atrás. Una pareja beta contrató los servicios de Eiji para que tomara fotografías de su boda que se iba a celebrar en esa fecha en la noche.
Ash estaba en una encrucijada. No podían celebrar el Día de San Valentín de día porque él tenía que estar estancado en el salón de clases hasta la tarde y Eiji tenía que trabajar en la noche.
Podía sonar melodramático para un alfa estudiado, y pueda ser que el Dia de San Valentín solo era una estrategia de marketing del sistema capitalista para generar exuberantes ganancias, pero si otras personas podían darle algo especial a sus parejas ese día, Ash también quería darle lo mejor a su omega. Su esposo se lo merecía. Era el único que le dio su corazón, alma y cuerpo completos.
Ash suspiró. Sabía perfectamente que su actitud estaba matando el espíritu de sus alumnos, y la de su imagen también. Incluso muchos ocultaron sus flores y regalos para que él no los viera.
Lo conocían bastante bien.
Sin embargo, el celular de Ash sonó sobre su escritorio. El sonido de tres campanitas tintilaron en toda la clase. De repente, sus alumnos estuvieron en alerta. Cada vez que sonaba ese característico rington, Ash les comentaba que eran sobre asuntos importantes que debía atender urgentemente.
Lo que pocos sabían era que eran mensajes que le enviaba su esposo Eiji.
Rápidamente, Ash se excusó con la clase, y leyó el mensaje.
¡Ash! ¡Buenos días! ¡Gracias por no despertarme hoy en la mañana! ¡Necesito energías para esta noche, pero lamento en no haber despedido de ti!(◞‸◟)¡Espero que no seas tan duro con tus alumnos! ¡Especialmente hoy! ('-ω-') Yo sé que no pudimos hacer planes para celebrar este día pero te tengo una propuesta para esta noche. Ya sabes... tú y yo... sólos... compartiendo algunos kisses. Te agrada esa dulce idea, cariño? ( ˘ ³˘)♡
Ash tragó saliva y se desajustó un poco el nudo de su corbata. ¿Cuándo empezó hacer más calor? Él pensó que Eiji iba a estar indispuesto a hacer algo con él porque llegaría a su departamento cansado.
Que tan equivocado estaba. Su omega iba en serio. Ni siquiera los emoticones japoneses podían ocultar las claras intenciones de su esposo. Eiji lo quería a él esa noche. Lo peor era él lo quería a Eiji ahora.
Ash sonrió embobado al leer el mensaje de Eiji otra vez.
Me agrada tu plan. Te espero en la noche, onii-chan.
Cuando mandó su mensaje, Ash levantó su mirada. La cara de sus estudiantes cambió radicalmente. Lo estaban observando con miradas curiosas y picaras. Para la desgracia de Ash, sus alumnos también sabían que el único que podía hacerlo sonrojar como en ese momento, era Eiji.
Ash aclaró su garganta y frunció el ceño. Él era la autoridad en su clase, un alfa de poder, y no debía perder la compostura por un descuido suyo.
— Muy bien, —alzó la voz. — Tarea para entregar hoy por vía electrónica.
La clase entera se quejó.
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Tough Kids
Fanfiction¡COMPLETADO! A la edad de ocho años, la vida de Eiji Okumura cambió radicalmente. Nunca se imaginó emigrar a Estados Unidos, en tener que aprender un nuevo idioma o que se convertiría en hermano mayor. Sin embargo, su gran sorpresa fue a los nue...