Pov escritora
Ana estaba más nerviosa que nunca, tenía que llevarle a Kate unos documentos que necesitaba para su trabajo, ya que hace unas semanas la habían cogido para trabajar en la empresa de Christian Grey.
Kate no paraba de decirle lo guapo que es y que debería conocerlo, pero Ana es demasiado tímida y jamás se atrevería a presentarse allí, a no ser que ocurriera algún percance, como éste.
Si Ana no le lleva esos documentos, Kate estaría perdida porque a pesar de que lleva casi un mes allí, aún está en periodo de prueba, y por cualquier despiste pueden despedirla, por ello Ana no se lo pensó dos veces, cogió su viejo coche y se dirigió a Seattle.
Cuando Ana entró a Seattle, el cielo empezó a oscurecerse, pero ella solo podía pensar en llegar lo más pronto posible para que su mejor amiga no tuviera ningún problema.
Entró directamente y aprovechó que las chicas que deberían atenderla estaban ocupadas con algunos socios, así que se dirigió corriendo hacia el ascensor y entró en él.
Pulso el número 8, corrió lo más rápido posible cuando sus puertas se abrieron, pero grave error, tan rápido salió que no se dio cuenta de cuando chocó con alguien y cayó al suelo.
–¿Se encuentra usted bien?–dijo aquel caballero agachándose para ayudarla.
–y-yo.. sí. Lo siento, estaba buscando..–cuando alzó la mirada y pudo mirarlo al fin, se quedó hipnotizada en sus ojos grises y se quedó sin habla.
–Soy Christian Grey, ¿puedo ayudarla en algo, señorita?
No se lo podía creer. ¿Así que este guaperas tan educado, encantador y atractivo es el famoso Christian Grey?
Ana no podía dejar de mirarlo, pero entonces reaccionó.
–Oh, no se preocupe solo vine a traerle algo a.. alguien.
–¿Cuál es su nombre? –preguntó el joven, intrigado.
–Amm.. yo soy–
–hey, no sabía que ya habías llegado. –dijo Kate saliendo de su oficina.
–Eh.. sí, acabo de llegar.
–Disculpenos, señor grey. ¿Le importa si se la robo un segundo?
–En absoluto, de hecho tengo que irme a una reunión. Acuérdate de los papeles que te pedí hace un par de horas –dijo hablándole a Kate, pero no dejaba de mirar a Ana.
–Enseguida, señor Grey.
–Guau –susurró Ana mirando por dónde se había ido.
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volverte a ver- Christian y Ana
Romance"now I'm standing alone In a crowded room, and we're not speaking and I'm dying to know, is it killing you like it's killing me? I don't know what to say since the twist of fate, when it all broke down. And the story of us looks a lot like a traged...