El Tullido

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Era temprano por la mañana, Un día normal como cualquier otro, soleado de hecho en comparación con el día de ayer hoy esta particularmente caluroso, no hace casi nada de brisa y el aire esta lleno de humedad, por una calle cerca de un distrito escolar vemos a un hombre caminar, un hombre alto y delgado con gafas de aumento y una camisa a cuadros abotonada hasta el cuello, unos pantalones de vestir bien planchados y unos zapatos negros brillantes y muy pulcros tanto así que, se podría afeitar su dueño con el reflejo que le devuelven. Las personas parecen pasar alrededor de este hombre sin tan siquiera verlo a la cara y Manuel lo prefiere así odia que las personas lo vean a la cara siente que invaden su espacio y lo hacen sentir incomodo. Aunque lo que en realidad mas odia es que le tomen fotos. Su madre solía decir que algo que capte así la esencia de una persona, enfadaba a dios eso y las personas sucias.
Por estas razones de peso Manuel siempre al caminar veía hacia abajo, tal vez eso evita que la gente se fije en el y lo señalen pensaba este.
Que iba camino a su trabajo como siempre a pie porque al ser un hombre que no le gustaba que le vieran a los ojos por, timidez o por locura odiaba el transporte publico.
Demasiados pecadores juntos que pensaría su madre de ellos.
Nada buena, si nada bueno.
Pensaba Manuel, este trabaja de bibliotecario un trabajo que amaba por la tranquilidad y el orden que podía tener. Era un hombre ordenado en exceso y su sistema de ordenar los libros infalible.
Yo siempre se donde esta todo siempre, pensaba este camino del trabajo.
Llega por fin a la biblioteca publica donde trabaja un edificio grande de color blanco que da la apariencia de ser mas viejo de lo que en realidad.
Manuel llega saludando cordialmente a todos sus colegas quienes le responden igualmente.
 Un día Antes
Clivet va camino a reunirse con el forense en la morque del la ciudad, en su auto llega a una esquina y lo detiene un semáforo en rojo al voltear a su derecha la ve una licoreria, Clivet siente como un miedo atroz atraviesa su cuerpo piensa hace las de dos meses que no bebo nada un trago no me hará ninguna daño.
Mientras que su conciencia le grita
No no lo hagas hemos aguantado mucho para caer en esto no podemos volver a fallarnos lo hicimos por Ana y el niño necesitamos ser fuertes.
Dios acabo de ver a un hombre que le pulverizaron el rostro con algo.
Me estoy haciendo viejo para este trabajo, no viejo no es solo que estoy cansado y harto de estar solo dios como la extraño, pero yo le hice mucho daño, yo y mi estúpida debilidad nunca volveré a beber nunca sin importa cuanto lo necesite. El semáforo vuelve a cambiar y como si corriera de sus pensamientos y ansiedades acelera el motor del auto como si eso lo alejara de sus ansiedades y temores.
Concéntrate vamos hombre concentración pensó Clivet.
Que sabemos del caso bueno, numero uno un cadáver no hay testigos el único testigo fue el que llamo a la policía que tal vez incluso fue el asesino un hombre en un colchón viejo, que mas tenia traje tal vez venia de su trabajo, era un hombre bajo corpulento seguro que la edad era un hombre entrado ya en años, Supongo digo después de todo no tenia cara se la había vuelto nada apunta de golpes con algo.
Bueno el forense determinara algo mas, lo que ahora no me explico es porque nadie vio morir a ese hombre o nadie lo escucho gritar no es un lugar muy concurrido, sobre todo de noche pero por dios alguien debió ver. Porque nadie vio? Que no estoy viendo. De pronto Clivet se volvió a sentir ansioso un leve temblor en las manos junto con mareos algo que nunca había sentido. Tuvo que detener el auto en plena calle apartarse a un lado y vomito en la acera.
Penso que es esto que me pasa yo nunca ni en mis inicios en la policía me había pasado estoy. Y una parte de su cerebro le dijo bienvenido al miedo Clivet. Justo cuando esta mas desesperado sumido en su vía crusis existencial suena la radio
Clivet estas hay? Cambio.
Clivet respira hondo e intenta tranquilizar su cabeza mintiéndose así mismo diciendo es solo síndrome de abstinencia. Es solo eso y responde.
Si capitán aquí estoy voy camino del forense a ver el cuerpo, vere que se puede hacer con el caso pero esta difícil cambio.
Okey Clivet Pero pasa por la comandancia cuando termines quiero hablar contigo sobre tu estado de animo actual cambio y fuera.
                       Actualidad
Por fin termine de hacer la auditoria de los libros de biblioteca dice Manuel cansado pero con voz orgullosa casi sonriendo vea su compañero.
Un hombre calvo de lentes que le dice bien hecho y le pone la mano encima en señal de felicitación. Algo extraño sucede en ese momento Manuel reacciona de una forma extraña casi agresiva no una agresividad de dar un golpe o una reacción similar si no mas bien una especie de energía negativa de parte de Manuel como si le hubieran insultado.
El compañero de esto lo nota y quita rápidamente la mano y el silencio entre ambos domina la escena Manuel quien odia que lo vean mucho de frente por esta ves no evade la mirada como un roedor atrapado en una trampa mortal si no que lo ve con unos ojos que revelen mas de lo que este quería.
El compañero entre una combinación de confusión, miedo y pena dice adiós marchándose sin mirar atrás. Manuel decide que ya se termino su dia de trabajo y se marcha a casa con un solo pensamiento debo hablar con mamá.

El Festin de Los Cuervos (Capitulo Dos Parte 1adelanto)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora