Sickness;; SooKai|One shot

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Kai observaba curiosamente la forma en la que las demás personas en la fiesta bailaban y se divertían cambiando de pareja sin cuidado.
Las ganas de levantarse e invitar a su novio a la pista eran inmensas, sin embargo, Soobin no estaba tan de buen humor pues el nuevo marido de su prima no le caía del todo bien y era exactamente eso lo que celebraba la familia Choi, el casamiento de la hija de los tíos de Soobin. Kai ya conocía a la gran mayoría de gente que era relativa a su novio, no en las mejores circunstancias pero ya había tratado palabra con ellos antes.
Ya lo reconocían hasta en la calle como "el pequeño de Soobin", "el novio de Soobin", "el chicle del Choi más alto"; eso no le desagradaría en lo absoluto si tan solo Soobin no reprimiera todos los cumplidos que su familia quería soltar hacia él.

— ¿Qué tanto ves? — preguntó Choi tan tajante como siempre.

— Estoy viendo cómo bailan, amor; — volteó con una sonrisa hacia su novio, encontrándose con una mueca de fastidio — no sabía que tu familia sabía bailar tan bonito. — volvió a sonreír y apoyó su cara en su mano.

— ¿Por qué no vas? — Soobin trataba de encontrar lo bonito en la escena que formaban sus odiados parientes.

— P-porque no puedo ir solo, mi amor.— agachó la cabeza y el mayor de ellos sonrió con triunfo.

— Aprendes muy rápido, bebé. — Soobin le acarició los cabellos mientras continuaba con sus palabras — Sólo hicieron falta unas cuantas correcciones y ya, ¿no es así? —

— Ya, Soobin... — el mencionado alejó con furia la mano del cabello y rodó los ojos — Vamos a bailar, por favor. — tiraba de los bordes del traje de Soobin en forma de rogar pero se arrepintió al sentir cómo se alejaba bruscamente de él.

— Suéltame, Kai. Si quieres ir pues ve y ya, no me estés jodiendo. — acomodó su ropa con molestia y alejó aún más su silla.

Y, de nuevo, Kai se encontraba aburrido; anhelando poder levantarse y bailar tan lindo como lo hacía su familia de ley, incluso se imaginaba con Soobin, bailando desde lo más romántico hasta lo que no se cuenta.
Era cierto que Binnie no siempre estaba del mejor humor y también que solía rechazar todas las ideas que tenía Kai pero bueno, el lavado de cerebro había funcionado tanto como para que Kai siempre obedeciera a su novio.

— ¡Kai! — los dos diferenciaron el grito a pesar de la música tan fuerte que adornaba el ambiente — ¿Por qué están sentados ahí como los aburridos que son? ¡Vengan! — el niño se acercó a la mesa hasta quedar frente a los dos novios.

— ¡Beomgyu! — Kai se levantó parcialmente de su silla y abrazó lo que pudo alcanzar del cuerpo del primo de Soobin — ¿Está Yeonjun? —

— ¡Sí! — ese nombre y esa respuesta llamó inmediatamente la atención de Soobin pues él siempre creyó que Yeonjun tenía algo con Kai — Estamos todos bailando... o algo así allá, ¿vienes? —

— S-Soobin... — Kai giró la mirada hacia su novio en busca de permiso, el mencionado sólo lo miró con incredulidad esperando lo que ya sabía que pasaría — ¿Puedo ir? — Soobin pasaba su lengua por dentro de sus mejillas fingiendo pensar la respuesta.

— ¡Te va a decir que no! — habló Beomgyu repentinamente, tomando la muñeca de Kai quien aún se apoyaba en la mesa — ¡Corre antes que te lo prohíba! — Beom comenzó a reír mientras tiraba del brazo para llevar lejos al novio de Soobin, mismo que se dejó arrastrar hacia metros lejos del mayor.

Kai bailaba cerca, tan cerca de Yeonjun, Soobin sólo observaba.
Kai bailaba tontamente con Beomgyu, Soobin sólo observaba.
Kai parecía disfrutar de la forma en la que Yeonjun juntaba su entrepierna con el trasero de Huening, Soobin sólo observaba.