Katherine Swan junto con su hermana melliza Isabella deciden mudarse con su padre Charlie a Forks, Washington.
¿Por que Katherine le tendrá tanto cariño a este pueblo?
La última vez que ella estuvo allí, fue cuando tenía cuatro años ...
Historia ba...
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ACTO TRES | CAPÍTULO 36 ❝WILLIAM❞
— Quiero que sepas... que eres la mejor hermana del mundo —sonrió Bella sinceramente mirando a los ojos a la híbrida, Katherine miró fijamente sus ojos viendo en estos un brillo especial.
Katherine sonrió tiernamente- Gracias Isabella.
Bella hizo una mueca al escuchar su nombre completo— ¿Cuándo me llamarás 'Bella'?
— La verdad no lo sé, debes acostumbrarte —se encogió de hombros— ¿Recuerdas cuando mamá nos contó que me llamarían Isabelle?
Bella rió por lo dicho— Si, lo recuerdo. Mamá es algo... peculiar. —dijo apretando sus labios en una sonrisa forzada— Pero si fuera así, yo te llamaría Belle.
— Puedo imaginar eso —asintió Kathie con una sonrisa— De todas maneras, igual me gusta el nombre.
— ¿Así llamaras a tu hija? —pregunto Bella burlona.
— Quien sabe... —susurro la pequeña Swan mirando sus pies, los cuales se movían se forma tímida en la alfombra— Me gusta el nombre Sophia. —dijo de forma involuntaria.
— Sophia —sonrió Bella— Sophia Hale, no suena tan mal, ¿Verdad?
Katherine sonrió tímidamente— Me gusta.
Pasados algunos minutos en silencio la mortal miró hacía el regalo que descansaba al lado de su hermana— ¿Abrirás tú regalo? —preguntó señalando dicha caja.
La pequeña Swan sacudió su cabeza tratando de dispersar sus pensamientos, seguidamente giró su cabeza para mirar la caja a su lado.
Al momento en el que Katherine abrió la caja y sacar el vestido para poder observarlo, Bella soltó un jadeo sorprendida.
— Es un vestido... de bodas.
Kathie solo observaba el vestido en sus manos, estaba anonadada— Es... e-es...
— Es hermoso Katherine —susurró Bella, no podía creer lo que estaba viendo, era simplemente precioso.
La pequeña Swan asintió con la cabeza, en su rostro lentamente se formó una sonrisa, recordó aquel día cuando fue a visitar a la familia Cullen— La visión de Alice... sólo había que esperar... —susurró para ella misma.
— Kathie, ¿Qué sucede?
— Nada —dijo sacudiendo su cabeza— Podrías..., por favor —extendió su mano hacía la puerta de su habitación indicándole que saliera, había pasado tiempo suficiente con su hermana melliza.
— Ah, claro. —habló Bella distraída levantándose de la cama para seguidamente salir de la habitación.
